La preocupación por la dermatosis vacuna se extiende entre los ganaderos
GANADERÍA
La conselleira de Medio Rural habló en Mazaricos sobre medidas preventivas
25 oct 2025 . Actualizado a las 19:35 h.En menos de un mes se cumplirán 25 años de la aparición del primer caso gallego del mal llamado mal de las vacas locas. Fue el comienzo de una psicosis colectiva que tuvo al sector contra las cuerdas y de la que muchos ganaderos se acuerdan estos días a raíz de la detección de 17 focos de dermatosis nodular contagiosa en diferentes granjas de Cataluña y de la aparición de otros casos, previamente, en diferentes zonas de Francia.
Un asunto que preocupa notablemente a los ganaderos barbanzanos por cuanto puede suponerles importantes pérdidas de dinero e incluso la ruina total si tienen la mala suerte de que la enfermedad entre en sus establos. Tanto es así que, con un solo animal infectado —a dolencia se manifiesta con fiebres altas y la aparición de nódulos firmes y úlceras en diferentes partes del cuerpo del animal—, la normativa obliga a sacrificar la totalidad de la cabaña e incluso a inmovilizar todas las granjas en un radio de 50 kilómetros. Todo esto sin que la granja reciba ningún tipo de indemnización por esta contingencia.
«Para nós sería unha ruína total. Incluso cun positivo na zona, a actividade de centos de granxas xa se vería moi condicionada e suporía perdas de moitos miles de euros», lamentaba un ganadero en el transcurso de la visita que la conselleira do Medio Rural, María José Gómez, realizó a las instalaciones de Ganxabar, una explotación de recría con capacidad para 1.200 animales procedentes de casi una decena de granjas de la zona.
Tampoco la responsable autonómica escondió su preocupación por una situación que ha llevado a la Xunta a decretar la inmovilización —prohibición de entrada y salida de animales— durante 21 días de aquellas granjas que hayan incorporado animales de fuera de Galicia. Esos bovinos serán sometidos también a una vigilancia por parte de los veterinarios oficiales de la Xunta de Galicia.
En este sentido, la titular autonómica quiso lanzar un mensaje de tranquilidad al sector ya que la enfermedad, que no conlleva riesgo para las personas, no ha sido detectada en Galicia. Con todo, señaló la necesidad de «reforzar as medidas preventivas co obxectivo de protexer á cabana gandeira» e incidió en la conveniencia de aumentar las desinfecciones de instalaciones y transportes o limitar el acceso externo a las ganaderías.
Estrategia de coordinación
María José Gómez también explicó a los ganaderos que desde la Xunta se reclamó del Ministerio de Agricultura una estrategia clara de coordinación «para o control eficaz desta enfermidade, co fin de levar a cabo medidas homoxéneas entre as diferentes comunidades autónomas».
Si bien no existe todavía confirmación oficial, todo apunta a que la semana que viene se suspenderán las tradicionales ferias de ganado que todos los martes se celebran en Silleda y los miércoles en Santiago. Esa es, al menos, la intención de un grupo importante de tratantes que operan en Galicia y que temen las dificultades con las que pueden encontrarse para llevar hasta su destino final a los animales que compren en esos mercados. Una posible suspensión que trastocaría la actividad de las granjas de la zona que necesitan deshacerse de animales.
