Barcos gallegos acusan a Sea Shepherd de acoso y de poner en peligro a las tripulaciones
PESCA Y MARISQUEO

Piden amparo a Pesca porque su barco, el Walrus, se aproxima peligrosamente al aparejo y, además, graba con drones al personal
18 sep 2025 . Actualizado a las 04:46 h.La oenegé conservacionista Sea Shepherd ha retomado su campaña Dolphin Bycatch Spain y ha regresado a aguas gallegas, donde en marzo pasado sus activistas grabaron a dos arrastreros devolviendo al mar cerca de una veintena de delfines que habían capturado incidentalmente. Esas imágenes, que la organización colgó en redes sociales, derivaron en una controvertida denuncia por parte de la Guardia Civil a un patrón de Ribeira.
Y el regreso del Walrus —la embarcación de Sea Shepherd— también ha sido polémico. De nuevo en redes colgaron un vídeo denunciando el acoso de un arrastrero gallego, al que acusaron de realizar maniobras peligrosas para intimidar a los activistas. Pero los barcos de litoral gallego ponen en duda esa versión y los acusan de provocar: «Son ellos los que se aproximan y hacen el paripé. ¿Como va a embestir un pesquero a una embarcación con la maniobra que esta tiene, con el doble o el triple de velocidad que un pesquero?»
Es más, los patrones aseguran que han tenido que reconvenir al Walrus —un «barco fantasma», dicen, porque no tiene bandera— por radio porque «nos encontrábamos virando con maniobra restringida, y se estaban aproximando peligrosamente al aparejo».
Los armadores han pedido amparo a la Secretaría General de Pesca, a la que solicitan que tome las acciones oportunas contra una embarcación que, aseguran, está poniendo en riesgo a la flota de litoral. No solo por esas maniobras de aproximación, sino porque, además, hacen volar drones por encima de los pesqueros, con «el peligro que supone que cualquier percance haga caer al dron sobre la cubierta del barco y cause daño a los tripulantes». A todo esto, esperan que quienes manejan el vehículo no tripulado tengan los permisos en regla y, el operador, la titulación y la autorización pertinente. La que desde luego no tienen es la de la tripulación para poder ser grabada, lo que, según dicen, vulnera la intimidad de los marineros.
La flota arrastrera acusa a la oenegé de querer desprestigiar a los españoles, pues «a escasas millas están la flota de pelágicos franceses e irlandeses pescando bonito, que tienen un alto descarte de cetáceos» y, sin embargo, no son hostigado.