
Los proyectos pasan por tres fases: la de viabilidad, la definición y la de detalle
13 jun 2025 . Actualizado a las 22:56 h.Los buques de guerra se construyen para llevar a cabo operaciones en condiciones extremas, lo que exige una gran dedicación. Los proyectos de estos barcos suelen incluir varias fases generales: viabilidad, definición, y detalle.
El diseño del buque de guerra se inicia con la fase de viabilidad, que consiste en la toma de una serie de decisiones, por parte de un grupo pequeño de personas, encaminadas a la búsqueda de la solución que presente la mejor relación entre las características del buque y su coste. Para ello será necesario conocer de antemano cuáles serán los requisitos operativos que deberá cumplir el buque y, además, deberemos disponer de una base de datos de buques similares que proporcionen información actualizada sobre características principales.
Dentro de estos requisitos exigidos existirán algunos que serán de obligado cumplimiento y otros que serán optativos y con varias alternativas posibles. También habrá que conocer cuáles serán los datos de mayor relevancia en el proceso de dimensionamiento del buque, entre los que se encontrarán la autonomía (millas navegables que podrá realizar el buque sin necesidad de tener que entrar en puerto), la velocidad máxima, la velocidad económica (asociada al requisito de autonomía), la capacidad (tamaño mínimo del buque necesario para poder ubicar el sistema de combate y la dotación, cumpliendo con las características específicas impuestas en los términos del contrato), o los estándares de habitabilidad.
Junto con los requisitos anteriores también se deberán definir, en caso de existir, las restricciones al diseño que se vayan a fijar en el proyecto, tales como un calado máximo del buque para acceso a determinados puertos, o limitaciones en manga para el paso por canales.
El proceso comienza con la definición del conjunto de requisitos necesarios y se desarrolla a través de una serie de actividades sometidas a comprobaciones intercaladas en el proceso. Estas confirmarán la validez de la espiral del proyecto a través de los resultados obtenidos hasta ese momento.
Fase de definición
Los datos de entrada de esta fase los fijan los requisitos del programa y los documentos y planos resultantes de la fase anterior de viabilidad. En ella se desarrolla una única solución de proyecto del buque, cumpliendo los requisitos y estándares establecidos por el cliente. En esta fase, a diferencia de en la de viabilidad, los objetivos se plantean con la meta de ser cumplidos en su integridad, por lo que se debe huir de estudios de otras alternativas, a excepción de que el propio desarrollo del programa, y de manera excepcional, así lo exija. No se debe olvidar que el producto característico de esta fase es el proyecto de contrato.
Los resultados obtenidos en esta etapa deben permitir la firma de la orden de ejecución (el contrato de construcción) de una manera consistente. Para alcanzar este fin las fases de viabilidad y definición suelen realizarse por un grupo de proyecto de hasta 30 ingenieros, en un período de uno o dos años, en el que se elaboran entre 100 y 200 planos y documentos. Se trata de un grupo de carácter multidisciplinar, e iterativo, que permite cubrir tanto las disciplinas típicas de diseño, como las diferentes especialidades.
Fase de detalle
Esta fase abarca la documentación de contrato que incluye los documentos resultantes de la fase de definición, y tiene como finalidad la preparación de esta para hacer posible la adquisición de los materiales y equipos del buque. La fase de detalle se subdivide en subfase funcional y subfase de construcción, que en su conjunto constituyen el proyecto de detalle.
La subfase funcional tiene un alto contenido de ingeniería, y sus productos principales son los planos funcionales (esquemas), las especificaciones técnicas de compra (ETC) de los equipos, las estimaciones de material, y los diferentes planes. En esta etapa se establecen los fundamentos de la estrategia constructiva (EC), y los documentos de esta subfase son imprescindibles para el desarrollo de la subfase siguiente.
La etapa de construcción tiene por finalidad la elaboración de los planos necesarios para la producción, incluyendo toda la información de detalle necesaria. Estos planos incorporan las listas de materiales necesarias para el aprovisionamiento, y por su contenido, son una herramienta importante para la inspección durante la construcción.
La duración de ambas subfases varía dependiendo de la complejidad del buque y del tipo de programa. Aproximadamente en un programa típico de buques de superficie, la subfase funcional puede tener una duración mínima de doce meses, instante en el cual se inicia la subfase de construcción.
Raúl Villa Caro es doctor ingeniero naval, oficial de la Armada, capitán de marina mercante y secretario de la Fundación Exponav.