Producción de miel en Galicia: cosecha irregular y contrastes entre costa e interior
GANADERÍA

En España, la recogida fue en el 2024 un 20% superior a la del año anterior
12 ago 2025 . Actualizado a las 12:51 h.La producción de miel en España logró superar de nuevo el año pasado la barrera de las 30.000 toneladas, después de dos campañas marcadas por una sequía que ralentizó el trabajo de las abejas. Pero esta cifra global que ofrece el Ministerio de Agricultura, y que supone un incremento de un 20 % con respecto a la producción del año anterior, no es un indicador totalmente fiable de lo que está ocurriendo con un tipo de ganadería formada por 36.833 explotaciones en España, de las que un 17 % son profesionales. Porque la producción y la calidad del producto es tan variable como la climatología que afecta a la floración de las especies dominantes en cada parte de España.
En Galicia, la cosecha de este año parece ser que será irregular, con bastantes diferencias entre las zonas de la alta montaña, el interior de provincias como Pontevedra, y la costa, desde A Mariña a las Rías Baixas. Porque mientras en la montaña de Ourense y Lugo todo apunta a que será buena en relación a las últimas campañas —aunque en Ancares peor de lo que se esperaba—, en el litoral es probable que se quede en regular o «malota», lamentan en el sector.
«Na costa, ao chover tanto na primavera, apenas floreceu o eucalipto, entón non parece que vaia ser moi boa a colleita. Xa levamos dous anos que case non hai floración de eucalipto. No interior, en cambio, parece que vai mellor», explica Ester Ordóñez, la presidenta del Consello Regulador de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP) Mel de Galicia. Comparte esta apreciación con Adrián del Campo, de Conde Santo, que a la espera de la floración de los brezos dice que «este ano na Mariña vai ser regular».
En la montaña lucense, todo apuntaba a una cosecha muy buena hasta que llegó el calor. Cuenta Óscar Cedrón, un apicultor de Cervantes, que «hai un mes as abellas fixeron un parón en seco». Habrá que esperar a ver qué pasa «co melato do carballo e coa flor do castiñeiro», dice. Pero lo que asegura es que, este año, la miel de Cervantes es más clara que en anteriores campañas. La razón: la flor de las silvas, porque «cando floreceu, aproveitárona ben». Aunque cuando se habla de miel no se puede generalizar, al menos en la zona donde tiene sus 600 colmenas «cada vez hai menos mel porque ás abellas aféctalles moito o cambio climático, algo que está aí e quen non o saiba ver que merque unha colmea», explica. Luego está la varroa, la velutina....
No resulta extraño que la producción de sus colmenas sea tres cuartas partes de la de hace veinte años: «Entón as colmeas tiñan unha media de 5 alzas — secciones adicionales que se colocan sobre la cámara de cría para almacenar la miel—, agora están en tres e pico».
Desde Miel de Luz, en Viana do Bolo, explican que para calificar la cosecha «hai que ver con que se compara. A curto prazo é boa porque vimos de anos moi malos, pero se miras máis para atrás é regular». En la Serra do Candán, donde tiene sus colmenas David Liñares, de De Liñares, las abejas no pudieron aprovechar la flor del castaño porque «a partir de la primera semana de julio cortó la producción de néctar debido al aumento repentino de las temperaturas y el constante viento de nordés...».