Satureja, la hembra de lince ibérico de pelaje blanco avistada en Jaén

M. A. / M. P.

SOCIEDAD

La lince ibérico hembra en un hábitat natural en Jaén
La lince ibérico hembra en un hábitat natural en Jaén Ángel Hidalgo | EFE

El fotógrafo Ángel Hidalgo se maravilló al encontrarse con una lince ibérica de pelaje blanco que parecía «irradiar luz propia», a la que inmortalizó con su cámara. Según especialistas, no se trataría del primer caso y descartan que se trate de albinismo o leucismo

30 oct 2025 . Actualizado a las 23:29 h.

«El fantasma blanco del bosque mediterráneo», tituló Ángel Hidalgo a la imagen de un ejemplar de hembra de lince ibérico en su hábitat natural. Rápidamente, la imagen recorrió el país entero y muchas personas se interesaron por ella. El fotógrafo jiennense describió en su post de Instagram la historia detrás de este encuentro: «En un lugar nuevo, donde comencé a rastrear hace pocos meses, revisando una de mis cámaras de fototrampeo observé algo que no podía creer. A partir de ahí comencé a dedicarle todo el tiempo del que disponía: tenía que ver esta maravilla con mis propios ojos», aseguró.

Hidalgo dio todo lujo de detalles sobre cómo consiguió llevar a cabo el encuentro: «Fue pasando el tiempo, horas, días, semanas e incluso meses sin éxito, incluso en muchas ocasiones a punto de tirar la toalla. Una mala mañana, después de llover durante la noche, al amanecer estaba caminando, como tantas veces había hecho, cuando de pronto, a lo lejos, veo un bulto blanco que parecía irradiar luz propia». 

Gracias al trabajo de las últimas dos décadas de varias instituciones ambientales encargadas de la preservación de animales, el lince ibérico dejó de estar en peligro de extinción el año pasado, alcanzando hasta entonces un total superior a los 2.000 ejemplares. Entre los proyectos responsables de este logro está Life Lynx Connect, una organización que se dedica a «aumentar el tamaño global de la población, así como también la conectividad entre los núcleos de lince ibérico para asegurar una metapoblación funcional y autosostenible», como describen en su página web.

Francisco Javier Salcedo, actual coordinador de este proyecto, fue entrevistado por varios medios nacionales acerca de la imagen capturada por el fotógrafo jiennense. A pesar de que en algunos sitios se afirmó que se trataba de un ejemplar leucístico, el ambientalista sevillano se encargó de desmentir esta información. Según menciona el responsable del proyecto para el cuidado de los linces, se trata más bien de una variación provocada por factores del entorno: «No es albinismo ni leucismo, y estamos investigando qué es lo que ha podido ocurrir. Pensamos que podría estar relacionado con la exposición a algo ambiental».

Satureja, como dijo el especialista que se llama esta hembra, es la primera lince avistada con esta condición en Jaén, pero no así en la península ibérica, como se había afirmado. Se tiene documentación de una hembra con las mismas características que fue vista en Córdoba y que luego recuperó la pigmentación de su pelaje con los colores habituales. Seguramente ambas hembras tengan un parentesco y, tal vez, con el estudio de ambos casos, puedan conseguir nuevos hallazgos

A pesar de derribar el mito de que se tratase de una lince blanca por naturaleza, su viralidad a través de las redes sociales ayuda a concienciar sobre su preservación. El fotógrafo de 29 años culminó su mensaje en Instagram mencionando la relevancia que tuvo este logro en su vida: «El encuentro con este felino fue un recuerdo inolvidable para mí, y me hizo pensar la importancia de la naturaleza y de la conservación. Ojalá esta larga historia sirva para inspirar a algunos a apreciar y proteger la belleza natural del mundo que nos rodea».