Un joven denuncia una agresión homófoba en Alicante con un botellazo en la cara: «Para que luego digan que los gays no sufrimos homofobia, que son casos aislados»
SOCIEDAD
Daniel, de 23 años, grabó en vídeo el momento del ataque, que le provocó varias heridas cortantes en la nariz que requirieron de múltiples puntos de sutura
01 jul 2025 . Actualizado a las 14:48 h.Un joven de 23 años ha denunciado una agresión homófoba en Alicante sucedida el pasado domingo, 29 de junio, alrededor de las 5 de la mañana. Según se puede ver en el vídeo compartido por el propio Daniel en redes sociales, varios jóvenes lo increparon en plena calle y, mientras se alejaban, uno de ellos, de espaldas, le lanzó una botella que impactó en plena cara de la víctima, provocándole varias heridas cortantes que requirieron de múltiples puntos de sutura.
Tras el ataque, el joven, con dolor en el tabique nasal y cefalea, acudió a las urgencias del centro de salud, donde le realizaron una radiografía y le detectaron una fractura de los huesos de la nariz. Al día siguiente, presentó una denuncia en la comisaría de Distrito Centro, que ha sido asumida por la Brigada de Información especializada en delitos de odio, según informan medios locales. La Policía Nacional investiga ahora el incidente e intenta localizar a los tres individuos.
«Para que luego digan que los gays no sufrimos homofobia, que todo esto son casos aislados», reflexiona el joven alicantino en su publicación de Instagram, en la que asegura que el ataque «brutal, homófobo e injustificado» se ha producido «por ser gay y por estar así vestido».
El objetivo de su denuncia pública es doble. Por una parte, identificar a los tres individuos, «para que esto no quede impune»; por otra, para hacer visible la violencia que todavía sufre el colectivo LGTB en la actualidad. «Lo comparto por todos los gays y personas LGTB que no han podido llegar a casa», asegura, «por todos aquellos a quienes les arrebataron la vida solo por ser quienes eran». «Hoy fui yo, pero mañana puede ser cualquiera», destaca el joven, por lo que hace un llamamiento a compartir su agresión.
Porque, en su opinión, en muchas ocasiones, muchos miembros del colectivo temen denunciar este tipo de agresiones, en parte por un sentimiento de culpa. «Muchísima gente siente que tiene que esconderse, que merecen el odio», considera Daniel, «y nada más lejos de la realidad». Recuerda a todas las víctimas que no nadie «tiene la culpa de recibir odio por ser» quien es. «Ser gay no es el problema. La homofobia sí», proclama.
«Yo soy hijo, soy amigo, soy buena persona», defiende el joven alicantino, «Yo vine a esta vida a disfrutar, a amar y a ser libre. Y no pienso dejar de ser yo».