Este moldeador 7 en 1 permite secar, alisar, dar volumen y rizar el pelo con resultados profesionales. Con un potente motor de 110.000 revoluciones por minuto, monitoriza el calor de salida para proteger el cabello y cuenta con un diseño «premium» y acabados de alta calidad.
22 abr 2025 . Actualizado a las 17:01 h.El cuidado personal ha experimentado una revolución en la era digital y actualmente existen dispositivos que permiten obtener resultados auténticamente profesionales sin necesidad de salir de casa. Un buen ejemplo de ello es el nuevo Dreame AirStyle Pro, un secador moldeador 7 en 1 que, fiel a la filosofía de la marca, incorpora la última tecnología en el cuidado del cabello y además un diseño de lujo que lo diferencia de otras propuestas que hay en el mercado. Cuando Dreame me propuso probarlo dije automáticamente que sí, porque aunque en mi azotea hace tiempo que no crece la hierba no es difícil encontrar candidatos deseosos de enchufarlo y experimentar con todas sus opciones. A la gente le gusta cambiar de look y este AirStyle Pro hace fácil lo que normalmente solo se consigue con una visita a la peluquería (y después de pasar por caja). Es un dispositivo perfecto para regalar el próximo Día de la Madre, pero también hará las delicias de ese adolescente que se pasa horas frente al espejo colocando estratégicamente hasta el último mechón de pelo, o de cualquiera preocupado no solo por la apariencia física, sino también por el cuidado y la salud de su melena.
El kit de Dreame entra por los ojos, pues se presenta en una caja de forma ovalada con exterior de cuero vegano en color caoba e interior en terciopelo negro. El cuerpo principal del secador también está recubierto de piel sintética y el resto de elementos metálicos lucen un atractivo acabado cromado en tono cobre que le da presencia y sensación de calidad. No estamos ante el típico secador con carcasas de plástico y se nota que los diseñadores han puesto todo su empeño en darle un aspecto premium, acorde con lo que esperamos que sean los resultados en nuestra imagen.
Junto al secador encontramos siete accesorios (con el mismo color cobre combinado con negro) que se conectan de forma magnética al cuerpo principal, por lo que ponerlos y quitarlos no puede ser más sencillo. Tenemos el cabezal o difusor principal de aire, un cepillo redondo para dar volumen, un accesorio para pelo rebelde, un cepillo blando con púas redondas, otro con púas cónicas y dos cilindros rizadores, uno para cada dirección en la que queramos hacer los bucles.
La clave de la eficacia de este secador está en su potente motor de 110.000 revoluciones por minuto y en la tecnología Jet AirFlow de Dreame, que genera un flujo de aire de alta velocidad para dar estilo con precisión a cada mechón. Además cuenta con un sistema que monitoriza la temperatura y ajusta el calor de salida 300 veces por segundo, protegiendo el cabello de daños térmicos. El flujo de aire convergente canaliza una corriente 60 metros por segundo hacia el pelo, para garantizar que la humedad se elimina de forma rápida y uniforme. Un detalle curioso es la conexión del cable de alimentación con el secador, con un ángulo inclinado de 37 grados y giro completo (360 grados) que reduce el contacto con las manos y evita enredos; una malla de acero inoxidable filtra el cabello fino y las partículas que puedan entrar en esta zona, y se puede desenroscar fácilmente para su limpieza. En la mano el aparato se nota muy ligero, sobre todo si lo comparamos con los secadores tradicionales, el mango mide 46 centímetros y pesa 290 gramos, así que es muy ergonómico y manejable. Por ponernos exquisitos, puede que algunos usuarios echen en falta una boquilla plana para dirigir el chorro de aire a áreas muy concretas y localizadas; no me extrañaría que Dreame lo incluya en futuras versiones o lo ofrezca como accesorio.
El motor de alta velocidad acelera el proceso de secado sin que se produzca frizz, el típico encrespamiento por la falta de hidratación, lo que hace que las cutículas capilares se abran y se hinche el pelo, dado como resultado un aspecto áspero y desordenado. Con el AirStyle pro queda suave y fácil de manejar, lo que sin duda es muy práctico cuando tenemos prisa y queremos vernos impecables en minutos. Dispone de tres ajustes de velocidad del aire (50 m/s, 55 m/s y 60 m/s) y otros tres de temperatura (ambiente o frío, 50 °C o templado y 80 °C o caliente). El cable mide 2,8 metros y el ruido no supera los 76 decibelios, así que podemos usarlo sin despertar a los vecinos.
Los accesorios magnéticos nos van a permitir secar, alisar, dar volumen y rizar, adaptándose así a cada tipo de cabello y a las necesidades y gustos de cada uno. Da igual si se busca un look sofisticado para una ocasión especial o simplemente un toque diferente para el día a día, el acabado es realmente bueno. Por ejemplo, si queremos simplemente alisarnos el pelo, el cepillo blando con púas redondas reduce los tirones y es apropiado para cabello suave y delicado, o incluso para aquellas personas que lo tienen frágil por tratamientos químicos (por ejemplo, a consecuencia de una enfermedad); también si el cuero cabelludo está sensible tras la exposición al sol, algo que cada vez será más habitual con la llegada del buen tiempo. En cambio, si tenemos rizos pequeños y cabello grueso, el cepillo duro con púas cónicas separa eficazmente los nudos en el pelo y está indicado para después de aplicar gel o productos de peinado. En general puede usarse con cabello seco y enredado.
El cepillo redondo se usa para dar volumen y también forma a las puntas. Grandes perforaciones esparcen el flujo de aire, lo que reduce el enredo y mejora el agarre del cabello para que tengamos un control más preciso. Obviamente, cuanto más larga tengamos la melena más podremos aprovechar sus posibilidades. Por su parte, el accesorio para pelo rebelde cuenta con unas salidas lineales densas dirigen el aire de alta velocidad de manera uniforme: permite domar el encrespamiento y lograr un acabado elegante y pulido.
Y llegamos a la función estrella de este tipo de dispositivos, que es crear rizos y ondas en el pelo, para lo cual disponemos de dos cilindros moldeadores, uno para cada dirección. Simplemente tenemos que situarnos frente al espejo y colocar el rulo al lado de la cabeza, con el símbolo del triángulo hacia fuera. A medida que enrollamos el cabello alrededor del cilindro, el triángulo orientado hacia fuera nos guía para crear un bucle natural en esa dirección. Es muy rápido (enrolla el pelo en 1 segundo) y el flujo de aire optimizado todo alrededor del accesorio permite rizar los mechones con una sola mano. Cada uno de estos accesorios tiene 32 mm de grosor y una vez conectados al mango todo el conjunto no supera los 370 gramos de peso. En el proceso de moldeado es clave también el botón de aire frío, basta mantenerlo durante 5-10 segundos para que los rizos se fijen y tengamos un peinado que aguantará durante largos eventos o reuniones.
En el kit vamos a encontrar también un pequeño cepillo de limpieza con forma cóncava para el filtro de entrada de aire y el libro de instrucciones, un poco pequeño para los que tenemos presbicia, aunque en la web de Dreame hay unos prácticos vídeos con los que reproducir paso a paso la forma de crear «ondas de sirena», el clásico rizo en forma de C, peinados elegantes con el pelo liso y la raya a un lado o el famoso estilo bob.
El Dreame AirStyle Pro está disponible en España por 349 euros y para celebrar el Día de la Madre la marca lanzará a partir del día 24 de abril y hasta el 7 de mayo una campaña de descuentos que dependiendo del producto pueden llegar al 31 %. Resumiendo, nos ha parecido un dispositivo de calidad, con un precioso estuche que permite guardar todos los accesorios y, sobre todo, con una tecnología que destaca por su eficacia a la hora de marcar el pelo. Se pueden crear rizos definidos, ondas naturales y acabados lisos y brillantes en pocos minutos, y es muy fácil de manejar. Es muy recomendable para todo tipo de cabellos, pero especialmente para melenas medias y largas.