Estudiantes y trabajadores del naval disparan la demanda de alquiler en Ferrol: «Hemos llegado a ubicar a operarios en Miño»

FERROL

Muchos universitarios han comenzado ya a buscar hogar para el próximo curso
06 may 2025 . Actualizado a las 11:02 h.«En 24 horas tenía una decena de perfiles distintos de posibles inquilinos para ofrecer para cada uno de los pisos. Ahora, el propietario puede elegir», afirma Laura García, responsable de la inmobiliaria Cisbar en la provincia de A Coruña, sobre los dos últimos pisos con los que contó en Ferrolterra para este cometido. El mercado del alquiler convencional en Ferrol y comarca es un visto y no visto. El auge de los pisos de alquiler vacacional, sumado al incremento de trabajadores temporales en la zona por carga de trabajo en el naval y la demanda universitaria, provocan que cada vez sea más complicado encontrar un piso de alquiler en Ferrol, e incluso ya en la comarca.
En abril se abre la veda para empezar a buscar alquiler universitario en la zona de Ferrol, comenta Arcadio Ares, al frente de inmobiliaria Callao. «Tenemos más de veinte estudiantes en lista de espera y hemos dejado alquilados ya algunos pisos», comenta. Ahora empieza un meticuloso trabajo para saber cuáles de los que ya tienen en cartera siguen el año que viene o se van, y quiénes se quedan en el mismo piso para empezar a distribuirlos. Y esta inquietud por dejar amarrado ya el alquiler para el próximo curso se aprecia también en las redes sociales y canales por los que los propios estudiantes tratan de comunicarse. Es el caso de Bea Moreno, madrileña estudiante del Máster de Museos, Archivos y Bibliotecas que recaló en Ferrol el curso pasado. Entonces lo tuvo complicado para encontrar habitación. «No empecé a buscar hasta que me aceptaron la matrícula, así que tardé un poco porque no pude mirar hasta agosto. Y ya había muy pocas opciones, quedaban los peores y algunos con condiciones horribles», reconoce. Los estudiantes ofrecen pisos o comunican que los buscan a través de grupos de Whatsapp, Twitter, Facebook, con el objetivo de poder juntarse entre ellos para poder alquilar pisos completos, y no por habitaciones. «Me contactó una chica que también estaba buscando para tratar de conseguir un piso juntas. Encontramos uno de cuatro habitaciones en la zona del Inferniño y buscamos otras dos chicas para completarlo», comenta. Los problemas llegaron a mediados de este curso, cuando una de las compañeras se marchó y trataron de encontrar reemplazo los últimos meses.
Por ello ahora, aunque ni ella ni otra compañera seguirán en Ferrol, tratan de ayudar a su casera y a la otra chica que se queda buscando ya sus posibles compañeras del próximo curso.
Interés en 48 horas
Otro de los grandes problemas a los que se enfrentan los estudiantes es encontrar alquileres solo por habitaciones, y no el piso al completo. Realizando una búsqueda en plataformas web como Idealista, ayer había medio centenar de propuestas —muchas anuncios independientes de cada habitación del mismo piso— de las últimas 48 horas. Ofertas que en muchos casos podrán cerrarse en pocos días o incluso horas. «Empezamos a tomar reservas para septiembre», reza el anuncio de un piso de San Juan cuya propietaria reconoce que para el próximo curso lectivo, el segundo año que lo oferta, ya lo tiene casi completo.
También ha recibido ya respuesta la propietaria de otro piso en la avenida de Vigo. «Soy de Ferrol, estuve años fuera por trabajo, y al volver decidí comprar un piso y arreglarlo como inversión», comenta. Su idea es tenerlo en alquiler vacacional durante el verano y alquilarlo a chicas estudiantes durante el curso. «Estoy buscando un perfil muy específico, he arreglado el piso con mucho cariño y para mí es muy importante la limpieza, lleva incluso una limpieza general al mes, y quiero conocer a las personas a las que alquile cada habitación y buscar buena sintonía», comenta. Ya ha recibido los mensajes de algún posible interesado, no obstante, no se ajustaban a lo que busca.

Un escenario complicado, a pesar de que desde el sector destacan que la oferta de pisos ha aumentado. «Hay mucho inversor que ha comprado, que alquila a estudiantes durante el curso y como alquiler vacacional en verano», señala Arcadio Ares.
Alquiler convencional frente al vacacional
Si el mercado está ya difícil para los estudiantes, empeora para quienes recalan en la ciudad naval por trabajo y necesitan un alquiler de pocos meses. «Tenemos lista de espera de estudiantes, pero para los trabajadores es una enciclopedia de espera. Ahí es brutal», advierte Arcadio Ares, gerente de inmobiliaria Callao, inmobiliaria que gestiona el alquiler para trabajadores de varias subcontratas y compañías del naval. «Tenemos unos límites de actuación en alquiler que hemos tenido que ir ampliando. Al principio se buscaba en los municipios de la ría, luego también en Valdoviño, después Ares, Mugardos, luego ya miramos en Cabanas y Pontedeume incluso. Pero no nos llega. Hemos hablado con propietarios que tenían algún piso a la venta en Miño, que no se van a vender de forma inmediata, para poder alquilar», comenta.
¿Qué es lo que le llama a un inversor a apostar por el alquiler convencional frente al turístico? «No complicarse. Recibir mes a mes un buen dinero sin tener que estar pendiente, y luego en verano lo compaginan con Airbnb o Booking», explica Ares. «La tranquilidad de no pagar comunidad, contribuciones, estar pendientes de cuándo se va un huésped y te llega el siguiente... Aunque gane menos, gana en estabilidad», añade por su parte García, de la inmobiliaria Cisbar. Apunta también a que a este volumen de desplazados por motivos de trabajo que busca un alquiler por un tiempo limitado forma ahora el grueso del alquiler convencional.