Normalidad en los colegios tras la confusión de primeras horas con la orden de apertura: «No sabemos nada, los alumnos no pueden entrar»

La Voz REDACCIÓN

EDUCACIÓN

Franciscanas de Ourense abrió sus puertas para atender a las familias que necesitaban conciliación.
Franciscanas de Ourense abrió sus puertas para atender a las familias que necesitaban conciliación. MIGUEL VILLAR

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció a las diez de la mañana que las escuelas infantiles deben abrir también para conciliación

29 abr 2025 . Actualizado a las 13:50 h.

No estamos abiertos para las familias. Solo en caso de incidencias dentro del colegio.

—Pero yo tengo esta comunicación de Abalar que dice que los colegios están abiertos para conciliación.

—No sabemos nada de esto. Los alumnos no pueden entrar. (La madre se da la vuelta, indignada, ante la negativa de la directora del centro de abrir la puerta).

La conversación que se produjo en el CEIP Ponte dos Brozos, en Arteixo, se repitió, más o menos literalmente, en otros centros educativos de Galicia, esos en los que el equipo directivo no pudo (o supo) actualizar la información, que llegó durante la tarde-noche de forma contradictoria pero que esta mañana resultaba clara: los centros escolares gallegos tienen que abrir para atender a las familias que necesiten conciliar, aunque no va a haber clase. Ya lo decía la consellería en su último comunicado, el de las ocho de la mañana: «Pedimos comprensión ás familias xa que algúns centros ponden non ter preparada a apertura para a primeira hora do día debido á dificultade para establecer as comunicacións».

Aulas vacías en el instituto Xelmírez I de Santiago.
Aulas vacías en el instituto Xelmírez I de Santiago. Paco Rodríguez

Finalmente, en el caso de Arteixo, el centro aceptó alumnado a partir de las diez de la mañana, después de recibir una llamada de Inspección alertando del error que cometían. En cualquier caso, desde las nueve de la mañana ni siquiera se acercaron al centro una veintena de familias, y eso que se trata de un colegio con unos mil alumnos. La práctica totalidad de las familias asumieron que hoy no había colegio, que fue la información con la que muchos se acostaron. Fue a medianoche, poco después de que el Gobierno de España se hiciese con el control de la emergencia en Galicia, cuando la orden cambió: las escuelas infantiles, colegios e institutos tienen que abrir para atender los casos de conciliación aunque no haya clases como tal. Este punto lo corroboró el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, a las diez de esta mañana de este martes.

Mientras tanto, el caos ha sido general entre familias, equipos directivos, profesorado y hasta personas de la Inspección, que a las ocho de la mañana todavía no sabían en qué condiciones quedaban hoy los colegios.

Algunos centros concertados enviaron a las familias una comunicación a primera hora avisando de que estaban abiertos aunque no había clase, y en varios casos estaba programado el servicio de comedor y las actividades extraescolares de la tarde. En los públicos, ni comedor ni transporte. Precisamente fue esto último lo que impulsó en la tarde-noche del lunes a la Consellería de Educación a avisar que los centros educativos estarían cerrados este martes: como no se sabía si habría electricidad esta mañana, no se podía garantizar el suministro de combustible a los cientos de autobuses escolares que cada día recorren Galicia llevando a los alumnos. 

El cambio de la decisión durante la noche tuvo consecuencias. Muchas personas no accedían a la app de Abalar, otras recibieron a las ocho de la mañana un aviso de su colegio diciendo que estaba cerrado y solo había gente para atender incidencias. Este término fue el que generó más problemas, porque unos entendían que en esa palabra se incluía la atención a los niños cuyas familias no tenían con quién dejarlos pero para otros era solo una cuestión técnica, por si había problemas en el interior del centro.

Algunos profesores no sabían siquiera a las ocho de la mañana si tenían que ir o no a su puesto de trabajo, o si iba a haber niños en el centro. Incluso algún inspector se levantó sin información que compartir con los equipos directivos, y los maestros fueron llegando a cuentagotas a los recintos escolares. 

Únete a nuestro canal de WhatsApp

Desde la consellería, se emitió a media mañana un comunicado resumiendo lo ocurrido: «En función da evolución deste apagamento xeral, e de acordo ás posibilidades técnicas derivadas desta situación, no ámbito educativo informouse para ir recuperando progresivamente unha mínima normalidade. En concreto, emitiuse onte un Abalar masivo informando da suspensión da actividade lectiva e transmitiuse a través das Direccións Territoriais a indicación de continuar abertos, comunicacións que en ocasións puideron non recibirse pola caída da rede. A primeira hora de hoxe, unha vez recuperadas as comunicacións, reiterouse cunha comunicación aos centros educativos. Tamén a través do Portal Educativo e das redes sociais». Se añade que «Inspección Educativa está desde primeira hora en contacto directo e permanente cos centros educativos», a la vez que se entiende comprensible que «nas primeiras horas da recuperación haxa incidencias que se resolven coa máxima celeridade. Débese ter en conta tamén que as comunicacións non se recuperaron ao mesmo tempo en toda Galicia, podendo xerarse nos primeiros momentos certa confusión en casos concretos».

Las escuelas infantiles, más caos

Si en los colegios e institutos hubo problema, en las escuelas infantiles la situación fue peor. Al no depender de la Consellería de Educación sino de la de Política Social, y desde la noche del lunes, de ninguna de las dos porque la gestión de la crisis está en manos del Gobierno central, la información era totalmente contradictoria. Hasta que a las diez de la mañana, cuando Rueda confirmó la apertura de centros, estos permanecían mayoritariamente cerrados.

Sin embargo, durante la mañana los centros educativos reenviaban a las familias que querían saber el horario de apertura un comunicado de la Subdirección Xeral de Demografía e Conciliación en la que se dice, literalmente: «Ante a imposibilidad de garantir a correcta prestación do servizo, e dadas as incidencias detectadas nas últimas horas en escolas infantís 0-3, a Xunta de Galicia indica que as escolas, infantís 0-3, os Puntos de Atención á Infancia e as casas-niño poderán permanecer sen actividade para as familias usuarias na xornada de hoxe, martes 29 de abril».

Por su parte, el Concello de A Coruña, anunciaba esta mañana que se suspendía la actividad en las escuelas infantiles, que no abrían a las familias. Eso sí, citaba la decisión de la Xunta de suspender las clases en los colegios ordinarios.