La Bolsa española ignora a Trump y se aferra a máximos del 2008

clara alba MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Altea Tejido Sánchez | EFE

El Ibex subo un 5 % en su mejor semana en cuatro meses, con los 15.000 puntos en el objetivo

08 ago 2025 . Actualizado a las 18:26 h.

Ni la guerra comercial desatada por Donald Trump, ni las tensiones geopolíticas ni la fragmentación política que impide aprobar medidas clave con los presupuestos para el país. Nada parece parar a la Bolsa española, que este año se ha convertido en la 'niña bonita' de los mercados europeos con una subida vertical del 27 % poco habitual en momentos de tanta incertidumbre.

Lejos de amedrentarse, los inversores parecen dispuestos a seguir agitando la coctelera de las ganancias y el Ibex 35 subió este viernes otro 0,9 % con un nuevo hito en el punto de mira: los 15.000 puntos que dejarían la puerta abierta a nuevos máximos históricos en el futuro inmediato. Cabe recordar que el parqué nacional marcó su máximo histórico el 8 de noviembre del 2007, en 15.945,70 puntos.

De momento, el selectivo ha logrado desactivar la barrera de los 14.800 puntos, nuevos máximos desde el 2008 y el cuarto consecutivo que marca este año con un pleno de subidas semanal que implica una revalorización de casi el 5 % en solo cinco sesiones. Se trata de la mayor subida semanal del indicador en los últimos cuatro meses.

Los analistas creen que, más allá de una posible complaciencia, los inversores han celebrado el pacto comercial entre EE.UU. y Europa, a pesar de ser conscientes de que, pese al acuerdo, el impacto económico de las tasas se dejará sentir en el medio plazo. «El arancel acordado del 15 % se ajusta en gran medida a nuestras previsiones y elimina los riesgos atípicos de un resultado más adverso», indican los analistas de Pimco.

En la buena evolución del mercado ha tenido mucho que ver, de nuevo, el sector bancario. La presentación de cuentas del semestre y la buena posición de las entidades españolas en los test de estrés de la EBA ha sido clave para redoblar la confianza de los inversores, en un momento de valoraciones ya muy ajustadas tras las fuertes subidas del ejercicio.

Pero si hay dos valores del sector que esta semana han captado la atención de los inversores, esos son BBVA y Banco Sabadell, que en plena opa cotizan en máximos -de finales del 2007 el primero y del 2010 el segundo- y no parecen tocar techo. En concreto, al mercado parece haberle sentado bien los últimos mensajes de BBVA en los que la entidad parece enfriar la opción de una mejora de su oferta por la catalana, algo que podría pasar factura a su cotización al tener que destinar más de lo previsto a una operación que ya ha pasado por demasiadas trabas. El banco vasco subió el viernes un 2,8 % y ha llegado a tocar los 16 euros por acción en máximos intradía por acción. En la semana acumula un alza de más de un 10 %.

Previsiones

Más allá de los bancos, los analistas coinciden en que la temporada de resultados ha sido especialmente positiva para las empresas cotizadas, también en Europa y Wall Street, pese al fuerte impacto que los aranceles impulsados por EE.UU. han provocado en sectores de mucho peso en el mercado como las automovilísticas.

Esos sólidos resultados del segundo trimestre y la proximidad de recortes de tipos por parte de la Reserva Federal de EE.UU. (el mercado descuenta ahora un ajuste de 50 puntos básicos de aquí a final de año) han llevado a las bolsas de EE UU también a máximos históricos. Pese a ello, los expertos piden no echar las campanas al vuelo, sobre todo durante un mes de agosto propicio para la volatilidad al reducirse los volumenes negociados y ante «recientes señales de desaceleración en la economía americana, la preocupación por el impacto de los aranceles sobre la inflación y unos ratios de valoración exigentes» que, a juicio de los expertos de Bankinter, «suponen un reto para nuevas subidas».

En la jornada de hoy también destaca la fuerte subida del precio del oro, que alcanza un nuevo máximo intradía de 3.534 dólares la onza, después de que Donald Trump haya decidido aplicar aranceles a las importaciones de lingotes de un kilogramo.