Los ciclistas dicen que pararán la carrera si se repiten los incidentes: la etapa de hoy acabó sin problemas
DEPORTES
La Vuelta se despidió de Galicia en O Barco de Valdeorras entre abucheos y protestas a favor de Palestina
10 sep 2025 . Actualizado a las 20:06 h.Las protestas contra el «genocidio» de Israel en Gaza han vuelto a ser las protagonistas en una nueva etapa de La Vuelta a España. A diferencia del día anterior en la provincia de Pontevedra, la carrera discurrió con normalidad y se pudo completar la hoja de ruta programada. Pese a ello, en la salida de ayer en O Barco de Valdeorras no faltaron las banderas ni las consignas habituales que siguen a La Vuelta, en señal de protesta por la participación del equipo israelí. «Esto no es una guerra, es un genocidio», se escuchaba en la villa valdeorresa mientras calentaban los ciclistas en una jornada marcada por la lluvia. Tras el arranque en O Barco de Valdeorras, la prueba pronto abandonó la comunidad gallega y entró en Castilla y León. El final de etapa en el alto de El Morredero no estuvo marcado por las protestas —apenas había público en las cunetas—, sino por la imagen del monte quemado por los incendios forestales.
En este ambiente, la continuidad de la ronda ciclista ha estado en el aire. Los ciclistas también han tomado la palabra para asegurar que si se producían nuevos altercados detendrían la carrera. Según informa la agencia EFE, el pelotón de La Vuelta a España prefiere que la carrera se neutralice en caso de incidentes, cuestión que ya ha ocurrido dos veces en la presente edición en las etapas de Bilbao y Castro de Herville. Una decisión que han tomado los ciclistas tras consultar a su sindicato, el CPA, antes de la salida de la decimoséptima etapa entre O Barco de Valdeorras, en Ourense, y el Alto de El Morredero, en León.
En la jornada barquense, a la llegada de las autoridades a la salida incrementaron los abucheos y las consignas críticas contra Israel y a favor de Palestina. «Israel asesina, La Vuelta patrocina», fue una de las proclamas que se escucharon, entre las que también se oyó (en tres ocasiones) con el final cambiado por «o Concello patrocina», en alusión al dinero que la administración local tuvo que pagar para ser inicio de etapa. Cuando iba a comenzar la carrera y una vez que se acercaron los corredores, las consignas eran más difíciles de escuchar. No porque los manifestantes dejasen de gritar, sino porque desde la organización se optó por subir el volumen de la música hasta un nivel ensordecedor. Eran un grupo de unas doscientas personas que se apostaron a ambos lados de la salida, justo a la altura en la que se coloca la cinta.
Entre los asistentes estaban los tres ediles del BNG en O Barco, liderados por Manuel Agra. Desde el grupo de la oposición habían pedido al alcalde, el socialista, Aurentino Alonso, que no participase en los actos de La Vuelta, aunque sin éxito. También acudieron a la manifestación la alcaldesa nacionalista de A Rúa, María G. Albert; y el regidor socialista de Vilamartín, Enrique A. Barreiro. Todos ellos, junto a un nutrido grupo de vecinos, participaron en una protesta pacífica que discurrió entre fuertes medidas de seguridad. En ningún momento hubo altercado alguno ni amago de querer saltarse el fuerte cordón policial apostado del otro lado de las vallas. Salieron los corredores y después los coches y autobuses de los equipos, de casi todos. El autobús del Israel Premier-Tech no pasó junto al pelotón. Los manifestantes se fueron unos diez minutos después, como el resto del numeroso público que se colocó a lo largo de la travesía para ver la salida.
A primera hora, los equipos que estaban alojados en la ciudad de Ourense -entre ellos el polémico Israel Premier-Tech, amanecieron con normalidad y abandonaron sin ningún tipo de percance la capital ourensana rumbo a O Barco de Valdeorras para la salida neutralizada. La Guardia Civil tiene un amplio dispositivo de seguridad desplegado por carreteras ourensanas. Según fuentes oficiales, la Unidad de Movilidad y Seguridad de la Guardia Civil Damaso Guillen está compuesta por 132 agentes, con 59 motocicletas, 28 vehículos todoterreno y de apoyo y un helicóptero. Tres guardias de esta unidad han nacido o se encuentra destinados en la provincia de Ourense. A mayores, la Guardia Civil de Ourense estableció un dispositivo de seguridad, apoyando a esta unidad especializada, con catorce guardias civiles y siete vehículos de seguridad ciudadana. Desde Tráfico, por su parte, aporta 30 agentes y catorce vehículos.
El alcalde de O Barco, Tino Alonso, destacó el despliegue de la Guardia Civil en O Barco y lamentó que la lluvia hiciera acto de presencia después de un verano en el que había hecho tanta falta por la ola de incendios. Sobre las protestas convocadas en solidaridad con Palestina y que han obligado a recortar el recorrido de la prueba en dos ocasiones, el regidor socialista indicó: «Eu espero que respecten aos deportistas. Todo o mundo ten dereito a manifestarse e todos estamos a favor de que ese conflito se acabe dunha maneira para o pobo palestino, que está vivindo unha especie de holocausto. So pedirlle á xente que sexan respectuosos cos deportistas».
Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Ourense, Eladio Santos, señaló: «Se houbera manifestacións ou concentracións legais sobre un acontecemento lamentable como o que sucede en Gaza se respectara ese dereito e se buscará a fórmula para compaxinar o evento deportivo con esta reivindicación. En todo caso, os incidentes non teñen sido especialmente graves, a pesar dalgún desaxuste que entendo que non están sendo relevantes».
También se refirió a la polémica desatada en la Vuelta a España por las protestas a favor de Palestina el presidente de la Diputación de Ourense. El popular Luis Menor concluyó: «Deixemos que a etapa discurra con normalidade e preservando a seguridade dos corredores e da súa comitiva. Ise é o chamamento que fago, que La Vuelta sexa unha gran proba deportiva e reivindicación da comarca de Valdeorras».
El BNG, por su parte, ha remitido este miércoles una declaración institucional contra el «genocidio» del pueblo palestino en la que también pide mostrar «solidaridad» con las personas que participan en actos de denuncia y protesta durante La Vuelta a España en la que participa el equipo Israel-Premier Tech. En el escrito, los nacionalistas piden que el Parlamento muestre su rechazo a la «masacre que el Estado de Israel está llevando a cabo sobre la población palestina» y lance una «contundente y rotunda condena al genocidio perpetrado».
El viento que azota en el Alto de El Morredero, en León, se ha añadido este miércoles a las amenazas que se ciernen sobre la Vuelta a España, ya cada día amenazada por las protestas contra la participación del Israel-Premier Tech. Poco antes de la salida, en el alto soplaban el viento a unos 50 km/h y la organización de la carrera se planea adelantar la meta a 5 kilómetros de la que debería ser la línea de llegada, en la localidad de Peñalba de Santiago.
Polémica política en aumento
El portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha considerado este miércoles que los responsables de la Vuelta Ciclista a España deberían entender que hay un «clamor popular» y que «por encima de esta manifestación deportiva también están los derechos humanos en el mundo». Preguntado en los pasillos el Congreso por las manifestaciones en favor de Palestina que están interrumpiendo la carrera, López ha pedido distinguir entre la protesta legítima para manifestar «lo que está pensando la inmensa mayoría de la ciudadanía española» y cuando se ejerce con violencia, algo que, ha subrayado, no ha sucedido. El portavoz socialista ha querido dejar claro que no comparten en ningún caso eventuales protestas violentas.
El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez Uribes, ha asegurado este miércoles que el deporte «no puede blanquear situaciones gravísimas de violación de derechos humanos», aunque también se trata del «último puente de comunicación», y que el Gobierno intentará que se celebre «con normalidad» el final de La Vuelta respetando las manifestaciones a favor de Palestina y contra Israel. «El Consejo Superior de Deportes no puede tomar decisiones que no puede tomar, pero sí puede animar y trabajar en los ámbitos propios. El deporte tiene que encontrar ese punto fundamental. No puede blanquear situaciones gravísimas de violaciones de derechos humanos, pero a la vez también tiene que ser el último puente de comunicación. Eso tenemos que conseguirlo entre todos», declaró Uribes en declaraciones a la sección de Deportes de Radio Nacional de España que recoge Europa Press.
La Real Federación Española de Ciclismo (RFEC) mostró su «enérgico apoyo» a La Vuelta Ciclista a España y resaltó que «ni los ciclistas ni el ciclismo son responsables de los hechos sobre los que se protesta», solicitando que estas manifestaciones contra Israel, a las cuales tiene «un máximo respeto», se realicen de «forma pacífica» y «sin obstaculizar el desarrollo de la competición y con el máximo cuidado hacia los corredores». «La RFEC quiere mostrar su más enérgico apoyo a La Vuelta a España, la competición ciclista más importante de nuestro país, un evento único seguido por millones de personas en todo el mundo y cuyo equipo humano, organización y participación alcanza los más altos estándares de calidad y de reconocimiento internacionales», expresó el organismo en un comunicado según recoge Europa Press.
La federación recuerda que está «firmemente alineada con los valores del deporte, como la búsqueda de la excelencia humana, el respeto por el adversario y la amistad entre los pueblos» y por ello «condena, con total contundencia y sin ningún género de duda, el terrorismo y el genocidio en Gaza». «El ciclismo es un deporte que promueve la cultura de paz», subrayó.
En este sentido, la RFEC expresó «su máximo respeto a quienes manifiestan de forma pacífica su protesta», pero recalcó que, «también y especialmente, su preocupación por el riesgo extremo que conlleva invadir el recorrido de cada etapa, dado que los ciclistas y vehículos de la carrera circulan a gran velocidad y quedan expuestos a graves caídas y lesiones, como ya ha sucedido». «Por todo ello, ruega a todas aquellas personas que se manifiestan a lo largo del recorrido de la carrera, que lo hagan de forma pacífica sin obstaculizar el desarrollo de la competición y con el máximo cuidado hacia los corredores, respetando el ejercicio de su profesión, dado que, ni los ciclistas ni el ciclismo son responsables de los hechos sobre los que se protesta», sentenció el ente que preside José Vicioso.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, pedirá por carta al Gobierno de la nación la «máxima seguridad» para la última etapa de La Vuelta en la capital española y ha censurado la imagen «horrorosa» que proyecta España de «antisemitismo» ante las protestas a favor de Palestina.
En una entrevista en Antena 3, recogida por Europa Press, ha afirmado que le gustaría que La Vuelta tuviera «el mismo dispositivo» de seguridad que Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando va a declarar. «Se comportan como narcos», ha valorado.
La presidenta ha insistido en que el caso de La Vuelta es competencia del Ministerio de Interior y de la Delegación de Gobierno y ha avisado de que las protestas que se están viendo «atentan contra la imagen de España». «Cuando tú atentas contra deportistas contra artistas, contra la educación, promoviendo el antisemitismo, la imagen ante el mundo es horrorosa y eso es lo que se está viendo, un país que agrede a deportistas y que ya le ha arruinado a un corredor inocente nada tiene que ver con nada de este tema», ha censurado.