Un emigrante retornado a los 100 años: «Estoy feliz, cuando emigré a Cuba Galicia era pobre y quería prosperar»

VIGO

Gonzalo Noval y otras 200 personas desembarcan en Peinador con el programa Reencontros Familiares de la Xunta
09 oct 2025 . Actualizado a las 01:20 h.Alborozo y caras felices en Peinador, como la de Gonzalo Nova. Este centenario nacido en Narón expresó ayer su emoción al aterrizar en Galicia procedente de La Habana, adonde llegó con 25 años en 1951 «después de hacer la mili». Pasará quince días en Carballiño y otras dos semanas con familiares gracias al programa para emigrantes Reencontros Familiares de la Xunta.
Gonzalo trabajaba en los astilleros de Ferrol y se marchó a Cuba porque «Galicia era pobre en esa época». Allí fue profesor de un instituto politécnico y montó un taller de fabricación de utillaje para los hospitales. Se casó con la cubana María Luisa Pérez, hace 56 años y ambos han retornado con su hijo, Enrique, que trabaja como informático en un hospital. «Estamos muy contentos», dijo al bajar del avión en silla de ruedas. Tiene la oreja cortada por culpa de un carcinoma, pero está bien, según explicó su mujer, que cuenta que el secreto de su longevidad es llevar «una vida sana» en la tierra del ron y los habanos. «En Cuba hay buenos geriatras en los hospitales y nos cuidan mucho», dice la mujer. Llevan 56 años casados y tienen dos hijos, el varón, de 43 y que viaja con ellos, y Judit, que vive en Miami, un lugar al que estos tiempos no quieren ir «porque está Trump», cuenta María Luisa, que es filóloga. «Nuestra hija tiene idea de volver a España».
El emigrante que ha alcanzado los cien años estuvo muy involucrado en la sociedad gallega en su país de acogida. Ahora los salarios han subido un poco y él cobra 3.285 pesos. «Los médicos rondan los 7.000 pesos al mes». Gonzalo recuerda que cuando llegó Fidel Castro «mejoró la situación, pero luego fue cayendo». Este emigrante formó parte del comité para potenciar la amistad cubana con Rusia ya que aquella URSS fue el principal aliado de los cubanos durante muchos años.
Noval integra uno de los contingentes de Cuba, Argentina, Uruguay, Bolivia, México, Brasil y Venezuela que van a pasar sus vacaciones en Galicia gracias al programa de la Xunta de apoyo a los gallegos que esta en el exterior. Son unos 500.000 y el 80 % ha nacido en los países de acogida y se sienten gallegos. Doscientos desembarcaron ayer en Peinador con el programa financiado por la Secretaría Xeral de Emigración.
El secretario de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, acudió a recibirles y se interesó por ellos: «É de xustiza que podan volver a ver ás súas familias despois de moitos anos sen facelo. É unha oportunidade para eles, que non esquecen a terra».
Miranda manifestó que la Xunta ha invertido este año 400.000 euros en los pasajes de estas personas que se marcharon a Latinoamérica cuando eran niños o jóvenes. El Gobierno gallego se hace cargo de la estancia y del alojamiento en las residencias de tiempo libre de Panxón y de Carballiño. Van a estar quince días.
Algunos emigrantes retornados se quejaban ayer de que, a su llegada a Madrid, no les han dejado adquirir un teléfono móvil pesar de tener el pasaporte de España. Es el caso de Manuel Pena, de 81 años y vecino de San Salvador de Bahía, en Brasil. Este exentrenador de la selección de Brasil de kárate explicaba lo sucedido y expresaba su malestar: «Hemos llegado a Madrid y no nos han dejado comprar un teléfono, aunque tengo pasaporte español». Su amiga Divina Martineis le ha comunicado expresamente al secretario de Emigración su sorpresa de que al llegar a la capital «nos pedían el DNI para comprar el teléfono, no nos valía con el pasaporte».