Los pescadores protegen los chocos en el interior de las rías de Pontevedra y Vigo
PESCA Y MARISQUEO

Mar acepta la propuesta de las cofradías pontevedresas y prohíbe a profesionales y recreativos capturarlos del 21 de julio al 31 de octubre
03 jul 2025 . Actualizado a las 10:49 h.Al Sepia officinalis se lo conoce en Galicia como chopo o choco, nombre que también se emplea en castellano, junto al de sepia o jibia. Este molusco cefalópodo, apreciado manjar valorado por los consumidores, cotiza en las lonjas gallegas a casi nueve euros el kilo, sin IVA ni tasas. Su carne gruesa de textura suave y su característica tinta negra seducen paladares. Reina en Redondela, donde desde hace 38 años lo exaltan con su afamada Festa do Choco. Una de las fuentes de ingresos de los pescadores de bajura, los pontevedreses han decidido protegerlo en el interior de las rías de Pontevedra y Vigo. Ahí, donde los técnicos han constatado «que a partir do mes de xuño a porcentaxe de individuos xuvenís capturados se incrementa nun 80 % respecto a meses anteriores», estará vedado para profesionales y recreativos desde el 21 de julio al 31 de octubre.
Nadie podrá coger ni un solo choco y, si cae en sus aparejos, deberá devolverlo al mar. Para dejarlo crecer, la Federación de Confrarías de Pescadores de Pontevedra, que preside José Manuel Rosas, le ha solicitado a la Consellería do Mar que prohíba capturarlo. Y así lo ha hecho: en la ría pontevedresa, por dentro de la línea imaginaria trazada entre punta Moa y punta de As Sinas, y en la viguesa, entre punta Monte da Guía y punta de O Con.
La consellería que preside Marta Villaverde atiende la petición de los pescadores y veta la captura de este cefálopodo de cuerpo ancho con cualquier arte pesquera en esas zonas. Como en otras, se acostumbra a coger con trasmallos, miños, nasas o poteras.También prohíbe tenerlo a bordo y, lógicamente, descargarlo y comercializarlo. Solo si procede del interior de las rías de Vigo y Pontevedra, porque en las demás zonas del litoral gallego sí se podrá pescar. Con todo, la mejor época para saborear el choco es tras el desove, a partir de Navidad, sobre todo en febrero, y se prolonga hasta mayo.