
El monte pide rentabilidad económica, como toda la vida
En los tiempos que corren, tan convulsos políticamente y tan contradictorios económicamente y socialmente, me dirijo a usted por lo que considero que es una emergencia para el ámbito rural de Galicia. Me refiero al hongo que en nuestra comunidad —concretamente en el oriente de la provincia de Lugo, específicamente en la comarca de A Fonsagrada— está secando los pinares. En mi aldea somos los particulares los que ponemos nuestro dinero y nuestro sudor por el trabajo que hacemos en el monte —a pesar de que ya no queda gente— impulsando nuevas plantaciones para que nuestros hijos dentro de 30 años (con suerte, si es que la nieve, el viento o el fuego lo permiten) puedan vender la madera. Esto era lo que se venía haciendo desde siempre. Sin embargo ahora, es imposible. El hongo destruye a todo tipo de pino: radiata, pinaster, silvestre. Estamos trabajando y gastando dinero para que en el monte solo quede maleza.
En contra de todos los movimientos ecologistas pido ayuda a la Xunta para encontrar una solución: permítannos plantar en nuestra tierra eucaliptos o cualquier otra especie que sea rentable tanto para los propietarios como para la cadena de valor que alimentamos: maderistas, transportistas, aserraderos, fábricas, etcétera. Entiendo que a los ecologistas y simpatizantes les guste la naturaleza, esa naturaleza que está viva gracias a la gente que la trabajamos, pero que no vive de los visitantes. Estas personas tienen que empezar a respetar lo que es nuestro: si tanto les gusta la naturaleza que compren tierra, que la trabajen y planten en sus propiedades las variedades de árboles autóctonos que consideren. manuel Gromaz Campos. Lugo.
Sede vacante
El lunes de Pascua amaneció con la triste noticia del fallecimiento del papa, un líder que buscó modernizar una institución milenaria. Iniciado el protocolo, se abre un período de luto y liturgia, pero también un complejo juego de poder. Ya se especula sobre su sucesor: ¿Un pontífice africano? ¿Un italiano? ¿Alguien más conservador o progresista?
La elección es crucial, no solo por la gran responsabilidad que supone ser el representante de Dios en la tierra, sino porque además será un jefe de Estado, y como todos los estados la Ciudad del Vaticano no está exenta de intereses políticos y económicos. El origen y visión del próximo santo padre revelarán las intenciones futuras de la Iglesia como institución. En las próximas semanas el mundo centrará su mirada en el cónclave y solo tras la fumata blanca y el Habemus papam descubriremos cuál será el veredicto final y el nuevo capítulo de la historia. Elena Fernández.