Hamás acepta liberar a los rehenes y exige discutir el plan de paz de Trump
INTERNACIONAL

El presidente de EE.UU. exige a Israel que «pare inmediatamente los bombardeos» en la Franja. El jefe del Ejército israelí ordena prepararse para implementar el plan
04 oct 2025 . Actualizado a las 15:04 h.La paz se acerca a Gaza, aunque aún no se sabe a qué precio. Tras recibir amenazas del presidente de EE.UU., Donald Trump, Hamás anunció que estará dispuesto a entregar a los rehenes y «a que se discutan los detalles» de la propuesta de paz que el multimillonario presentó a principios de esta semana. E igualmente, empezaron ya a anotar ciertos cambios que querrán imponer en los renglones de Washington.
Concretamente, el Movimiento de Resistencia Islámica certificó que los rehenes «vivos y muertos» serán entregados al completo. Pero el resto de la respuesta, difundida a través de Telegram, fueron más bien matices. El primero es que el partido milicia no da un visto bueno directo, sino que se abre a «iniciar negociaciones de inmediato a través de mediadores [Egipto, Catar y EE.UU.] para discutir los detalles de este acuerdo». Respecto al Gobierno post Hamás, asegura el grupo que tendrá que ser uno «basado en el consenso nacional palestino y el apoyo árabe e islámico». La frase enmascara el rechazo al liderazgo de Tony Blair para dirigir la transición política, como era de esperar, ya que este nunca quiso mediar por los intereses de Gaza cuando fue mediador del Cuarteto [EE.UU., la UE, la ONU y Rusia].
Otros puntos de la propuesta de paz, asegura el comunicado, «están vinculados a una posición nacional unificada y a las leyes y resoluciones internacionales pertinentes» que «se abordarán a través de un marco nacional palestino integral, en el que Hamás participará y contribuirá responsablemente».
Antes de la respuesta, Trump aseguró que «se debe llegar a un acuerdo con Hamás antes de las 6 p. m. hora de Washington [medianoche en España], ¡Todos los países han firmado! Si no se alcanza este acuerdo de última oportunidad, se desatará un infierno, como nadie ha visto antes, contra Hamás». El presidente reiteró que «las grandes, poderosas y ricas naciones de Oriente Medio» ya han dado el visto bueno [pese a que la Liga Árabe desmintió esa afirmación hace dos días], además de recordar que el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina debe devolver a todos los rehenes vivos y muertos y entregar las armas.
Después del pronunciamiento de Hamás, el presidente estadounidense ha dicho que cree que Hamás está «listo» para la paz, por lo que ha pedido a Israel que «pare inmediatamente los bombardeos» en el enclave palestino, donde han muerto alrededor de 66.300 personas desde el 7 de octubre de 2023. «Basándome en la declaración que acaba de emitir Hamás, creo que están listos para una paz duradera. Israel debe detener de inmediato el bombardeo en Gaza para que podamos liberar a los rehenes de forma segura y rápida. Ahora mismo, es demasiado peligroso hacerlo», ha anunciado a través de un mensaje publicado en su perfil de la red social Truth Social.
Trump ha confirmado que ya están negociando los detalles «que aún deben resolverse». «No se trata solo de Gaza, se trata de la tan ansiada paz en Oriente Próximo», ha aseverado minutos después de que la milicia palestina propusiera negociar algunos de los aspectos del plan de 20 puntos presentado por el mandatario estadounidense.
En el seno de la organización islamista no se resuelven otras discrepancias por el momento. El miembro de la oficina política de Hamás Mohammed Nazzal adelantó a la cadena Al Yazira que Hamás «tiene derecho a expresar sus puntos de vista de una manera que sirvan a los intereses del pueblo palestino».
La receta de Trump, no obstante, sigue encontrando objetores más allá de Tel Aviv y Gaza. Mientras Hamás mantiene la incógnita de si seguirá combatiendo o aceptará el fin de la guerra, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, habló por teléfono con su homólogo estadounidense para confirmar su apoyo a la propuesta de paz, pero aseguró, según un comunicado de la presidencia turca, que como condición Israel «debe detener sus ataques» sobre Gaza.
En las últimas horas el jefe del Estado Mayor de Israel, Eyal Zamir, ordenó «avanzar en la preparación para la implementación de la primera fase del plan Trump para la liberación de los rehenes». Zamir también enfatizó en dicha evaluación que la seguridad de las tropas es una «prioridad absoluta», por lo que indicó que deben «mantener un alto nivel de alerta y vigilancia, además de reforzar la necesidad de una respuesta rápida para neutralizar cualquier amenaza». El Gobierno de Israel comunicó en la madrugada de este sábado que el país se está preparando para implementar «inmediatamente» la primera fase del plan de paz para Gaza de Trump, sin hacer mención a la petición de Hamás de sentarse a negociar determinados aspectos del mismo.
Los juicios a «terroristas» agitan la política
Los miembros de la Global Sumud Flotilla encaran los primeros juicios y deportaciones tras ser interceptados por Israel. Dado que son 500 voluntarios de diferentes nacionalidades, el proceso será más largo que en otras misiones humanitarias. Pero con todo, el ministro de Seguridad Nacional, el ultra Bezalel Smotrich, instó al primer ministro Benjamin Netanyahu a dejar que estos pasen «unos meses» en la cárcel antes de ser expulsados a sus países de origen.
Según escribió en X, Ben Gvir quiere retener a los activistas «para que se acostumbren al olor del ala terrorista» y agregó que «no puede ser que el primer ministro los envíe una y otra vez y otra vez a sus países y que este envío provoque que regresen una y otra vez y otra vez». En un vídeo grabado en el puerto de Ashdod, acusó a los tripulantes de «terroristas» de Hamás.
Los detenidos fueron repartidos entre las cárceles de Ktziot y Saharonim, en medio del desierto del Néguev.
En la política, la flotilla sigue agitando aguas. Este viernes, y a pocos días de que el Congreso de los Diputados vote sobre el embargo de armas al Estado hebreo, iniciativa que no cuenta aún con apoyo suficiente, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, cerró filas con Pedro Sánchez calificando al Gobierno como «ejemplar en el mundo en la defensa de los derechos humanos y contra el genocidio en Gaza».
Después de días en los que tanto Podemos como Sumar han alzado la voz contra la decisión del Ejecutivo de ordenar a la patrullera Furor de la Armada que finalizara su escolta a la flotilla antes de entrar en el área de exclusión israelí, lo que podría haber derivado en un enfrentamiento armado, Díaz elevó las críticas a la comunidad internacional, en concreto a la Unión Europea, a la que pidió romper los acuerdos de asociación con Israel, aún vigentes por falta de unanimidad de los socios. «No puede ser que estén matando a los niños palestinos y poniendo en riesgo la vida de activistas españoles y de otros países», afirmó en un acto en Valencia junto a la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé. La dirigente de Sumar cree que hay que aplicar a Israel «la misma medicina» que con Rusia. La comunidad internacional convirtió en un paria al régimen de Vladimir Putin en el 2022, tras su decisión de invadir Ucrania. Algo que no ha ocurrido, denunció Díaz, con Netanyahu: «¿En Gaza no tenemos que hacer lo mismo?».
La organización que provocó la guerra con Israel con su ataque terrorista del 7 de octubre de 2023, afirma que ha llevado a cabo «amplias consultas dentro de sus instituciones de liderazgo, con facciones y fuerzas palestinas, y con mediadores y partes amigas, para llegar a una posición responsable con respecto al plan del presidente Donald Trump» y que «valora los esfuerzos árabes, islámicos e internacionales, así como los del presidente estadounidense, encaminados a poner fin a la guerra en Gaza, asegurar un intercambio de prisioneros, asegurar la entrada inmediata de ayuda humanitaria, rechazar la ocupación de la Franja y prevenir el desplazamiento de nuestro pueblo».