Javi Rueda llegó como tercer lateral al Belmonte y salió volando cara a Europa de celeste
GRADA DE RÍO
El futbolista del Celta se reencuentra con el Albacete, con el que jugó en Segunda en el curso 2024/2025
17 dic 2025 . Actualizado a las 16:37 h.Javi Rueda todavía tiene recientes sus recuerdos del Belmonte. Cuentan que su fichaje, en forma de cesión, en el verano del 2024 sorprendió. Los albaceteños ya tenían dos laterales derechos Álvaro Rodríguez y Carlos Isaac y el malagueño no entraba en la ecuación. Pero Javi sorprendió desde el primer día, porque el mismo día que fichó ya participó en un triangular amistoso con el Hércules y el Murcia y ya levantó su primer trofeo de verano.
Poco después, Carlos Isaac se marchó al Córdoba y a Javi le tocaba competir con Álvaro, que partía como favorito, por la titularidad. Pero darle la vuelta a la tortilla fue un juego de niños para el de Alozaina. En noviembre ya era indiscutible y una de las armas más poderosos del que fue apodado en su día como Queso Mecánico. Desde el principio, el céltico convenció a su paisano y entrenador Alberto González, por su velocidad, por su acierto en las marcas y por su facilidad para alcanzar la línea de fondo y centrar. En la banda derecha hizo una perfecta sociedad con Fidel Chaves. Vestido de blanco, el albaceteño acabó jugando 31 partidos, 25 de ellos como titular, acumuló 2.175 minutos y marcó cuatro goles (a Racing de Ferrol, Oviedo, Eibar y Elche), una cifra muy respetable para un lateral.
Albacete fue para Rueda el destino perfecto. En el verano del 2024 ya estuvo a punto de quedarse en el primer equipo céltico tras un gran ejercicio en el filial, pero no había sitio para todos y Claudio decidió que saliese cedido. Un año después, volvió a Vigo más hecho, preparado para dar el salto a la máxima categoría del fútbol español. Cuando comenzó la pretemporada, el técnico ya tenía claro que se quedaba. Seguramente fue la primera decisión de futuro que tomó antes de que finalizase el pasado ejercicio. Por eso de poco valió que el Albacete llegase a sondear la posibilidad de quedarse con el andaluz en propiedad. La decisión ya estaba tomada en Vigo.