Nadie quiere marcharse del Celta

X. R. C. VIGO

GRADA DE RÍO

RC CELTA

Los vigueses asumen que no habrá ninguna salida de la plantilla, lo que impide buscar a un jugador de último pase, que ahora es la prioridad

21 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El mercado del Celta está en punto muerto a 12 días de que se cierre la ventana estival. Ninguna de las cuatro opciones de salida que baraja el club se mueve y sin fichas disponibles, no hay fichaje posible. Tampoco valdría la vía de la rescisión, porque en este caso, no afectaría al límite salarial, que está prácticamente consumido. De producirse alguna salida antes del 1 de septiembre, el club tiene clara la prioridad: un jugador de último pase. Además, en caso de ser un portero el que abandone Vigo, el club le traería sustituto en una posición que tiene una prolífica oferta en el mercado y donde aparecen auténticas gangas en la recta final de cada ventana.

Pasan los días y nada se mueve. Da la impresión que nadie quiere marcharse de Vigo en un año tan especial, con la vuelta a Europa como telón de fondo. Franco Cervi tiene intención de cumplir el año de contrato que le resta en Vigo. El Celta le confirmó que tendría el camino libre en caso de llegar con alguna oferta, pero dicho escenario no se dio. El jugador, pese a su poca participación, está feliz como celeste y todo apunta que seguirá acudiendo todos los días a Mos.

El asunto Aidoo también está en punto muerto y muy lejos de cualquier solución que abriese la puerta del mercado. El central ghanés está comenzando a entrenar después de un verano con mucha inactividad en el campo y está por ver su papel si permanece en la plantilla más allá del 31 de agosto.

Lo mismo sucede con Iván Villar y Marc Vidal. Los dos están llamados a vivir a la sombra de Radu a lo largo de la temporada, pero no se ha dado ningún movimiento en los últimos días que alimente una opción de salida e incluso en el caso de Marc, su adiós no significaría un cambio de escenario en materia de límite salarial.

De irse un portero, entra otro

Lo que ahora tiene claro el Celta es que en caso de salir uno de ellos, ficharía un portero. Los vigueses manejan un amplio abanico de opciones entre las que no está Iñaki Peña, a quien en Barcelona daban como futurible del conjunto vigués. Lejos de lo que pudiera parecer, hay una bolsa importante de guardametas esperando por destino e incluso en los últimos días suelen aparecer opciones de mercado que, de entrada, parecían prohibitivas. Un ejemplo fue al llegada de Hugo Lloris a Los Ángeles de la MSL en el 2024. Sucedió a última hora y cuando el internacional francés se había quedado sin opciones.

Un jugador de último pase

De poder acceder a un futbolista de campo, escenario que parece muy complicado en estos momentos, el Celta tiene clara la prioridad, un futbolista de último pase, que se pueda mover cerca del frente de ataque, una carencia que no es nueva y que quedó patente el domingo ante el Getafe, pues los vigueses cayeron en un ataque muy previsible.

No será Iker Losada, que lo tiene hecho con el Levante para marcharse cedido con una opción de compra al conjunto granota. La vuelta del de Catoira a Vigo parecía una buena opción, pero la imposibilidad de movimientos del Celta llegó al mediapunta a explorar otros caminos.

De lo contrario, Iago Aspas tendrá asignado ese papel casi en exclusiva, aunque en el club también se piensa que tanto Bryan Zaragoza como Williot Swedberg pueden ejercer ese rol a lo largo de la temporada. Si todo saliese rodado, que no tiene pinta, un central también aparece en la hoja de ruta, aunque en estos momentos Claudio tiene a seis.