
El club azulgrana pudo incurrir en administración desleal y falsedad contable al pagar 15 millones para frenar la denuncia del Atlético por negociar con un futbolista con contrato en vigor
16 oct 2025 . Actualizado a las 17:45 h.Existen indicios de que el Barcelona pudo incurrir en los delitos de administración desleal y falsedad contable en el pago de 15 millones al Atlético de Madrid por el fichaje de Antoine Griezmann en EL 2019. Así lo determina el juez que investiga al club azulgrana por el pago de comisiones en fichajes durante la presidencia de Josep María Bartomeu.
Según informa El Mundo, el Juzgado de Instrucción número 32 de la Ciudad Condal, que recientemente imputó a Bartomeu y a algunos de sus directivos, concluye en un auto que debe añadirse a la causa el fichaje de Griezmann por el Barça por entender que el pago del traspaso se produjo para frenar la denuncia del Atlético por haber negociado con el futbolista francés cuando aún tenía contrato en vigor con el club rojiblanco.
El instructor entiende que «supuestamente, se negoció con un futbolista con contrato en vigor con otro club», tal y como desvelaron los correos electrónicos sobre la negociación secreta publicados por este rotativo. En consecuencia, argumenta el juez que el Barça «se saltó la normativa FIFA», que establece que los clubes no pueden contactar con un futbolista con contrato vigente si antes no han hablado con su equipo, y subraya que «se exceptúan los últimos seis meses de contrato del futbolista, que no es el caso que nos ocupa».
El juez añade en su auto que el Atlético de Madrid lo denunció ante la Federación Española de Fútbol, ya que tenía indicios importantes de que el club había negociado con el astro francés directamente entre febrero y marzo del 2019, un «período técnicamente prohibido».
Evitar una sanción de la RFEF
La resolución judicial abunda que «a fin de evitar una posible sanción de la FEF, supuestamente, por parte de los investigados, se negoció directamente con el Atlético de Madrid y llegaron a un acuerdo donde se valoraba el pago de 15 millones a cambio de no aportar pruebas al procedimiento que se había incoado».
«Para dar aspecto lícito a los pagos se simuló presuntamente que se adquiría un derecho de tanteo prioritario sobre diferentes jóvenes futbolistas del Atlético de Madrid», prosigue el juez, que concluye que una vez firmado el contrato de tanteo, «el Atlético de Madrid, presuntamente, desistió de aportar pruebas ante la RFEF sobre la denuncia presentada contra el Barcelona». Y añade el magistrado que estos hechos podrían integrar el delito de administración desleal y/o falsedad contable.