
Pide que se introduzcan «mejoras sensatas y compatibles con la obra»
20 jun 2025 . Actualizado a las 16:46 h.El Concello de Culleredo lamentó lo que tildó de «tono desproporcionado e impropio» del escrito remitido por la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) de la Xunta en respuesta a la propuesta municipal sobre la glorieta que se suprime en la AC-523 y otros aspectos de la ejecución del proyecto en Ledoño.
El gobierno local no cuestiona el proyecto educativo ni la tramitación urbanística realizada en su día, sino que traslada, «con rigor técnico y responsabilidad institucional, una preocupación real de los vecinos, motivada por la afección directa de la obra sobre la movilidad local, la seguridad peatonal y el acceso a parcelas particulares».
«Un Ayuntamiento no puede ni debe callar cuando se detectan problemas sobre el terreno y los vecinos realizan peticiones lógicas. Hablar ahora no es incoherencia, es responsabilidad», señala el alcalde, José Ramón Rioboo.
El gobierno municipal muestra su disconformidad con la respuesta de la Xunta, que «se centra más en desacreditar el papel del Concello que en atender las cuestiones técnicas formuladas, desoye las voces del territorio y pretende ponerle bozal a la participación ciudadana, al afirmar que el momento de opinar ya pasó».
Explica que fue la AXI quien marcó como condición la eliminación de la glorieta de la AC-523 para dar luz verde al Plan Especial del centro educativo. Por eso es quien tiene ahora la potestad de rectificar esa determinación. Para el Concello, la movilidad real, la seguridad y la accesibilidad a «no pueden ser asuntos cerrados ni definitivos, sino que deben ser revisados y adaptados cuando la ejecución de una obra muestra impactos no previstos».
El Concello, sin embargo, asegura que mantiene la mano tendida a la Xunta para mantener una reunión técnica a corto plazo y trabajar de forma coordinada, sin confrontaciones artificiales, con el único objetivo de defender el interés general y el bienestar de los vecinos.
El Concello de Culleredo, de acuerdo con las peticiones vecinales, propuso mantener la glorieta existente o sustituirla por una solución funcional equivalente, garantizar todos los accesos a las parcelas afectadas, e incorporar pasos peatonales u otras medidas de seguridad en el entorno del núcleo de Ledoño. Estas peticiones no suponen reabrir el proyecto ni bloquear el centro educativo, sino introducir mejoras sensatas y compatibles con la obra, para que esta sea más segura, integradora y respetuosa con el territorio.
En su día, en la tramitación del Plan Especial, hubo ya un período de alegaciones, pero una vez comenzó la obra, los propios usuarios comprueban que retirar esa rotonda resulta peor para su movilidad, y que además precisamente evitaba altas velocidades de vehículos y facilitaba en algún momento incluso cruzar la calzada, una reivindicación realizada por activa y por pasiva por el Concello y los vecinos desde hace más de una década. «El propio director de la AXI dijo en el 2023 que se tomarían medidas, pero la realidad es que la AC-523 sigue igual y aun empeorará si persiste en retirar esta glorieta», apostillan desde el consistorio.