Luz verde al centro de salud Santa Lucía, en A Coruña: «Va a ser un antes y un después»

Miguel Cebrián / R. D. A CORUÑA

A CORUÑA

ANGEL MANSO

Xunta y Concello se alían para transformar el mercado de A Falperra, que también acogerá un centro cívico y una nueva plaza de abastos

26 jun 2025 . Actualizado a las 20:52 h.

La espera terminó. Tras más de dos décadas de quejas y reivindicaciones vecinales, la alcaldesa Inés Rey firmó este jueves con la Xunta el acuerdo definitivo para transformar lo que un día fue el mercado de Santa Lucía en un espacio en el que convergerán el demandado centro de salud, además de un centro cívico y una nueva plaza de abastos. Ideado y llevado a cabo por el estudio Burgos y Garrido, el proyecto cuenta con un presupuesto de 10,3 millones de euros, de los cuales 5,8 vendrán de la mano del Gobierno gallego, representado este jueves por su presidente, Alfonso Rueda.

Ambos coincidieron en calificar la fecha de «histórica» y la alcaldesa incidió en que la reforma del edificio, en desuso desde septiembre del 2021, «non era unha demanda máis, senón unha das máis relevantes». «Foron 10 anos de promesas e reproches aos que hoxe lles poñemos fin a través desta firma simbólica», indicó. «O paso que damos é fundamental para poñer de manifesto que agora si, Concello e Xunta traballaremos da man para que no 2027 poidamos contar cunha infraestrutura tan necesaria», recalcó Rey, que agradeció la implicación personal de Rueda «dende a primeira entrevista», y también la «paciencia infinita» de los vecinos . «Non me custa recoñecer —dijo— que este é un dos asuntos no que nos gustaría ter sido capaces de ir máis rápido para que as obras xa estivesen en marcha porque esa é a única forma de que os cidadáns poidan ver que si, que agora non é un anuncio, que é unha realidade».

«A intervención supón a culminación dun proceso de colaboración entre institucións cun obxectivo centrado en mellorar a calidade de vida da cidadanía», destacó por su parte Rueda. Para el político, la creación de este espacio supone saldar una deuda pendiente con la ciudad y, en especial, con los vecinos de A Falperra. Además, puso énfasis en todos aquellos sanitarios que durante años han prestado sus servicios como podían en el antiguo ambulatorio de Federico Tapia en unas condiciones, reconoció el presidente, que «xa non respondían aos estándares da sanidade pública galega». «A rehabilitación suporá un antes e un despois para os profesionaiss que traballan nel e para as persoas que acoden diariamente», apuntó Rueda.

Los cambios en el edificio se harán respetando la filosofía del edificio original, diseñado por Gallego Jorreto, manteniendo su valor patrimonial para dar paso a una arquitectura funcional y convertirlo «nun centro de referencia», agregó .

La Xunta engloba este proyecto dentro de un «triple compromiso do Goberno galego: co reforzo da atención primaria, cunha inversión de 158 millóns de euros na mellora das infraestruturas básicas; coa sanidade pública de A Coruña e a súa área sanitaria, onde se está construindo o Novo Chuac cun orzamento de 500 millóns de euros e, por suposto coa propia cidade de A Coruña», recalcó antes de citar proyectos como la estación intermodal, la plataforma de baño de O Parrote, la recuperación de la fachada marítima o los programas de vivienda y rehabilitación urbana.

La colaboración entre las dos Administraciones provocará un aumento significativo de los servicios en materia de salud, ya que multiplicará los actuales 378 metros cuadrados del centro de Federico Tapia hasta más de 1.700, lo que permitirá doblar las consultas de medicina de familia, enfermería y pediatría. Además, incorporará nuevos espacios, como una sala de espera pediátrica, consulta de matrona, área de trabajo social e, incluso, una sala de educación maternal.

La Xunta financiará íntegramente la parte sanitaria del nuevo Santa Lucía, con una inversión cercana los 6 millones, más del doble de lo previsto inicialmente, y además se comprometió a ponerse «a total disposición do Concello» para garantizar una ejecución ágil y eficaz. El plazo de ejecución es de 18 meses y la intención es que las obras comiencen este mismo año.

El retraso en la actuación fue subrayado por el PP, que recordó que el protocolo para el centro fue firmado por el gobierno de Carlos Negreira en el 2014. «El gobierno municipal ha necesitado 11 años para formalizar algo ya encarrilado», afeó el portavoz popular, Miguel Lorenzo.