Carritos para perros

Ana Lorenzo Fernández
Ana Lorenzo ENCRUCIJADA

BARBANZA

17 jul 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay cosas que se nos están yendo de las manos. El nivel de protección de ciertos propietarios a sus mascotas llega en ocasiones a rozar un poco el absurdo. Después de vestir a muchos perros con todo tipo de jerséis, abrigos o plásticos para evitar que les coja el frío o se mojen con la lluvia, llevarlos a peluquerías especializadas para ponerlos guapos, o dejarlos en guarderías durante las vacaciones, una de las últimas tendencias pasa por pasearlos en carritos, como si se tratasen de bebés y no supiesen andar.

Evidentemente, algunos de estos canes podrían estar enfermos o sufrir alguna dolencia en un de sus extremidades, pero la estampa resulta de lo más curiosa, sobre todo teniendo en cuenta que estos animales llevan desde el inicio de los tiempos caminando a cuatro patas. Es más, desde que nacen su predisposición natural es a caminar sobre todo tipo de superficies, sea asfalto, tierra o arena, no a llevarlos en brazos y mucho menos en pequeños vehículos para que vayan contemplando el paisaje sin necesidad de mover ni un solo músculo.

Y si esta imagen ya es bastante sorprendente, el otro día fui testigo de otra todavía más. Una pareja se protegía de la lluvia con un paraguas, y el hombre llevaba otro más pequeño abierto con el que cobijaba del chaparrón a su perro, que caminaba a su lado atado con una correa. Podría pensarse que era para que no se mojara y luego oliese mal, pero tenía que realizar verdaderas peripecias para taparlo, con lo que habría sido más sencillo cogerlo en brazos y no hacer malabares. En fin, lo dicho, cosas veredes...