Cocaína, heroína, joyas, puñales y robos mutuos: así funcionaba el narcopiso que la Policía Nacional acaba de desarticular en Vilagarcía

AROUSA

Los cuatro individuos que lo gestionaban y han sido detenidos protagonizaron una sangrienta reyerta hace un mes en el centro de la ciudad
10 jul 2025 . Actualizado a las 21:18 h.El Cuerpo Nacional de Policía acabó esta semana con un importante punto negro de distribución de cocaína y heroína al por menor en el centro de Vilagarcía. Los tres hombres y la mujer que lo hacían funcionar han sido detenidos. No solo por un delito de tráfico de sustancias que causan grave daño a la salud. En el caso de dos de ellos, también por robo con violencia. La operación, ejecutada por los agentes de la Comisaría arousana, se denomina Tatoo y se cierra con la intervención de 35 gramos de heroína, 40 de cocaína, medio kilogramo de sustancia de corte que empleaban para adulterar aun más el material que movían e incrementar sus ganancias, y 5.500 euros en billetes fraccionados, además de básculas de precisión y teléfonos móviles.
Hasta aquí, mercancía, instrumental y dinero que tenían que ver, directamente, con la red de trapicheo que los cuatro habían organizado en torno al domicilio familiar en el que habían establecido su negocio. Otro tipo de artilugios que los agentes también encontraron en su poder dan cuenta de que sus actividades no eran precisamente de las que contribuyen a tranquilizar a un vecindario. En el mismo narcopiso atesoraban armas blancas, documentación y una pistola de fogueo. Por último, esta gente guardaba varias piezas de joyería en la misma vivienda. La policía trata de precisar su procedencia, bajo la sospecha de que algunos de sus clientes pagasen la cocaína y la heroína con artículos robados. De ser así, a los dos delitos que penden sobre ellos se uniría el de receptación.
La investigación se remonta a diciembre, cuando la colaboración ciudadana alertó a la Comisaría de que un apartamento situado en el centro de Vilagarcía estaba siendo empleado para la venta de sustancias psicotrópicas. El grupo local de la Policía Judicial comprobó que, efectivamente, a él acudían regularmente consumidores en busca de mercancía. Con el caso confirmado y bien argumentado, los agentes detuvieron a sus cuatro protagonistas y registraron el narcopiso el miércoles de esta semana.
Los datos que la operación fue recabando dibujan un perfil acerca de los cuatro arrestados que puede ser cualquier cosa menos sosegado. Por lo visto, no tenían problema alguno en robarse unos a otros. Tampoco en emprenderla a golpes entre ellos. El 14 de junio, una reyerta hizo saltar las señales de alarma entre la plaza Doutor Carús, la glorieta de la Mariña Española y la avenida Doutor Tourón. Una pelea entre tres personas, con vasos rotos de por medio, obligó a las policías nacional y local a atender a los heridos y a practicar un torniquete para evitar males mayores mientras Emerxencias limpiaba un reguero de sangre que se extendía a lo largo de un centenar de metros. Eran los mismos tipos.