
Andersson y Westermann empezaron la semana con problemas físicos, pero confían en jugar ante el Cantabria, y el canterano Sergei se fracturó la nariz
02 oct 2025 . Actualizado a las 12:59 h.El inicio de curso no está siendo generoso con el Monbus Obradoiro en el capítulo de los problemas físicos. A las lesiones de Lundqvist y Huskic se ha sumado la del canterano Diego Sergei, operado de urgencia el miércoles tras sufrir una fractura en la nariz en el entrenamiento. Se perfilaba como una de las alternativas para cubrir este sábado el hueco dejado por el pívot serbio.
No se queda ahí el parte de preocupaciones. Denzel Andersson se perdió las primeras sesiones de la semana por una distensión y Westermann, que ya está trabajando con el grupo, paró por unas pequeñas molestias musculares.
De todos los percances, el más grave es el de Huskic, que obligará al club a acudir al mercado. Entre tanto, y mientras se recupera Lundqvist, que ya está haciendo trabajo individual y en un par de semanas podría empezar los ejercicios con balón, al cuadro técnico no le quedará otra opción que optimizar los recursos disponibles actualmente. «Tendremos que adaptarnos a lo que tenemos», indicó Epi, sin olvidar la dura derrota de Menorca.
El entrenador tiene claro el contexto: «Hay que darle vueltas. Evidentemente, no venimos de la mejor manera. Ahora seguro que hay más dudas en las cabezas de todo el mundo. Cuando vienes de una derrota siempre hay más dudas. Vamos a ver si somos capaces de estabilizarnos, siendo conscientes de que ahora mismo no disponemos de dos jugadores de mucho talento, de dos jugadores que para nosotros serían piezas muy importantes para lo que queríamos jugar».
La primera receta no tiene secretos. Los que están son los que tienen que tirar del carro: «Creo que tenemos otros diez jugadores, más los de la cantera que están entrenando con nosotros. Tenemos que apretar y sacar lo mejor de cada uno sin que nos pesen mucho las dudas. Ahora, evidentemente, tenemos que cambiar algunas cosas de cómo queremos jugar. Pero hay muchas cosas que desde el primer día hemos intentado implementar y que tenemos que seguir manteniendo. No puede ser que ahora, porque Goran y Olle no estén en el equipo, las dejemos de jugar. Y defensivamente vamos a tener que hacer un esfuerzo».
Epi también tiene claros todos los factores que debe manejar el Obradoiro en la búsqueda de un fichaje, después de hacer un esfuerzo económico en verano en la confección de la plantilla que no será óbice para volver al mercado, obligado por las circunstancias: «Vamos a buscar lo mejor que podamos traer al equipo sin la prisa que nos lleve a equivocarnos, pero sin la pausa de que nos pueda dejar que un proyecto como este sufra durante muchas semanas sin un jugador importante en la pista». No es fácil.
Además, asume que encontrar un perfil como el de Huskic raya con la utopía: «La filosofía no puede ser que sea contraria a incorporar a un buen jugador. Vamos a intentar incorporar al mejor jugador posible y nos tendremos que adaptar a lo que nos dé, evidentemente. Si tenemos la opción de fichar un jugador con características similares a Goran, pues yo lo prefiero. Pero claro, no vamos a fichar solo a un jugador que tenga talento ofensivo para pasar el balón. Nosotros vamos a intentar buscar el mejor jugador posible y yo me tendré que adaptar. Evidentemente, tenemos dos perfiles de cincos dentro del equipo. Vamos a intentar buscar una cosa un poco diferente, pero a lo mejor ya a estas alturas no la hay».