Un juzgado de Padrón acepta por primera vez en Galicia investigar una querella por los crímenes del franquismo

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO / LA VOZ

PADRÓN

Edificio de los juzgados de Padrón.
Edificio de los juzgados de Padrón. XOAN A. SOLER

La querella de Manuel Reboiras logra esquivar el archivo por prescripción de los hechos con el que se habían encontrado el resto de casos

26 jun 2025 . Actualizado a las 13:21 h.

Manuel Reboiras, hermano del histórico militante de la Unión do Povo Galego (UPG) Moncho Reboiras, muerto por disparos de la policía en Ferrol en agosto de 1975, ha visto cómo su querella se ha convertido en la primera admitida a trámite en Galicia contra los crímenes cometidos por el franquismo. No ha sido un camino fácil. Su caso, como el del resto de denunciantes hasta ahora, se había encontrado con el portazo del sobreseimiento y archivo porque los jueces consideraban que los hechos había prescrito. Sin embargo, la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Padrón ha aceptado el criterio de la Fiscalía y al menos ha abierto diligencias penales.

«É un feito extradordinario e moi importante porque senta un precedente que pode ser tomado en conta noutros procedementos», explica Inés A. Francés, abogada de Ceaqua, la Coordinadora Estatal de Apoyo a la Querella Argentina Contra los Crímenes del Franquismo.

Manuel Reboiras sufrió dos detenciones y en ambas fue torturado en comisaría. La primera se produjo el 28 de septiembre de 1975 en Padrón y la segunda 18 de junio de 1976 en el monte O Castro de Vigo. Por ello fue en la ciudad olívica donde presentó la querella, pero allí se encontró con la misma suerte que han corrido otras 115 en toda España: sobreseimiento y archivo por prescripción de los hechos.

Manuel Reboiras, en una imagen de archivo.
Manuel Reboiras, en una imagen de archivo.

Sin embargo, esa puerta que se cerró abrió otra, porque el juzgado vigués se inhibió en el de Padrón en el caso de la detención sufrida por Manuel Reboiras en la capital de la comarca del Sar. Inicialmente, la jueza padronesa también sobreseyó, pero un recurso de reforma presentado por la Fiscalía le hizo modificar su postura y ahora sí ha admitido a trámite la querella.

En Ceaqua han acogido con satisfacción la decisión judicial porque «supone y representa un mínimo avance en esta materia», pero advierten de que «es indudable que Estado español debe revertir, de una vez por todas, sus políticas de impunidad, implementando medidas legislativas que garanticen, de una vez por todas, el derecho a la tutela judicial efectiva de las personas que sufrieron graves violaciones de derechos humanos durante la dictadura franquista y la Transición».

Además del de Manuel Reboiras, en Galicia está ahora mismo también a la espera de qué deciden los tribunales Xosé María Brañas Pérez, que presentó querella en los juzgados de A Coruña también por torturas.

Para la letrada Irene A. Francés, inadmitir a trámite las querellas por crímenes del franquismo alegando prescripción de los hechos es no querer aplicar el derecho internacional porque, recuerda, «os crimes de lesa humanidade non prescriben»