
El nuevo atacante del Celta dejó buena sensaciones ante el Stuttgart
27 jul 2025 . Actualizado a las 10:09 h.En Alemania llegaron por fin los primeros minutos con buenas sensaciones de Ferran Jutglà pese la sequía en estos primeros cuatro amistosos. Sin suerte cara puerta, el catalán sigue sin abrir su cuenta particular con el Celta. Como contra el Benfica o el Famalicão, le costó encontrarse cómodo en el campo. En los primeros compases, robó un balón con intención, pero se le volvía a ver perdido, solo y sin ideas. Llegando tarde a presionar y sin ofrecer desmarques.
Todo cambió pasados los primeros 25 minutos: a partir de ese instante, el catalán encontró espacios, se movió e hizo jugar a un Celta que era incapaz de crear nada más allá de tres cuartos de campo. A partir de sus dos ocasiones y de las indicaciones de Claudio, el equipo se estiró y Ferran encontró espacios donde trabajar y sacar sus primeros destellos de calidad que acostumbra a dejar el catalán en el campo.
Tras la pausa, se comenzó a ver ese Jutglà jugón, cómodo en un partido abierto y con ambos conjuntos más estirados. Interpretando bien los tiempos sin desperdiciar tantos balones arriba como Swedberg o Jones.
Los disparos
Las dos grandes ocasiones del Celta en la primera parte corrieron por sus botas. La primera, en el minuto 23, llega tras un error local en construcción en tres cuartos de campo celeste. Jutglà recupera y sale a la contra desde campo propio. El disparo saldría despedido por un central a córner. Una buena oportunidad desperdiciada donde el propio Jutglà fue perdiendo fuelle a poco de llegar al área controlando erráticamente el balón.
El otro disparo, tres minutos después, llega en otra contra a cargo de Jones, que cede un balón mal medido a un Jutglà que se ve forzado a derrapar para hacerse con el esférico. Con él controlado, el catalán no duda y lanza un cañonazo hacia portería que se marcha muy por encima del larguero rival.