Acusaciones de secuestro y agresiones entre Paulina Rubio y Colate por su hijo
GENTE

Un juzgado dictamina que la cantante deberá acompañar al menor en su viaje para visitar a su padre en España. El adolescente estaría viviendo «el peor momento de su vida»
10 jul 2025 . Actualizado a las 13:16 h.Más de diez años llevan en liza en los juzgados Nicolás Vallejo Nájera y Paulina Rubio a cuenta de su divorcio y de la custodia de su hijo, Andrea Nicolás. Los cruces de acusaciones se superponen y la vida del menor está condicionada por las decisiones judiciales. Después de que el pasado mes de marzo se le retirara el pasaporte al niño como medida cautelar, en la vista celebrada el pasado lunes en la Corte de Miami, la magistrada ha dado permiso para que el niño recupere el documento y regrese con normalidad España.
Además, ha determinado que sea Paulina Rubio quien acompañe al menor, de 14 años, en su viaje a nuestro país y también que lo recoja cuando llegue el momento. El fallo recoge también que el padre no retiene su hijo en contra de su voluntad, tal como acusaba la madre.
Todo comenzó cuando el 11 de marzo, el empresario español sacó a su hijo del colegio media hora antes de lo habitual para celebrar juntos su 53 cumpleaños. Al conocer la noticia, Paulina Rubio presentó una demanda exprés contra su exmarido en la que alegó que «podría secuestrar al menor y llevárselo de Miami sin su consentimiento». Fue entonces cuando retiraron el pasaporte a Andrea Nicolás para garantizar su permanencia en Estados Unidos.
En mayo, la guerra se recrudeció cuando el niño llamó a su tutora acusando a su madre de haberle agredido físicamente presuntamente en su mansión de Miami tras una discusión a cuenta del móvil con el que el niño quería llamar a su padre. El escándalo dio la vuelta al mundo y, mientras Colate aseguró que su hijo estaba creciendo en un ambiente «tóxico y peligroso», con acusaciones a la cantante de «violencia física», la letrada de la artista, Sandra Hoyos, defendió que la tutora había informado de «un berrinche adolescente». «Ni Paulina le puso la mano encima, ni le pega, porque se la hubiera llevado la policía», argumentó. «Solo fue una guardiana que le pidió una cita a la Corte para decir que esta familia está en crisis y necesita ayuda», zanjó.
Se produjo entonces una audiencia virtual en la que Rubio negó las acusaciones que fueron ratificadas por Amber Glaper, la empleada del hogar que llamó a la policía y que declaró como testigo. La jueza impuso entonces a Paulina Rubio acudir a terapia familiar.
«El peor momento de su vida»
El drama ha empeorado con la última demanda de emergencia de la mexicana solicitando que le «devuelvan» a su hijo, a quien lleva sin ver un mes. Una denuncia en la que también afirma que el empresario español tiene «retenido» al menor desde su graduación a principios de junio y está manipulándolo mientras lo mantiene aislado con el fin último de llevárselo a España.
En la tensa vista judicial, Colate ha alegado que ha asumido la custodia de su hijo para «protegerle» y evitar que su madre vuelva a agredirlo. En este sentido, ha apuntado que su hijo está viviendo «el peor momento de su vida». Además, ha aportado pruebas de que había ido a casa de la madre para entregar al niño pero que ella no se encontraba en el domicilio, por lo que Andrea Nicolás se quedó con él.
Después de oír a todas las partes, la magistrada ha ordenado que toda la familia siga acudiendo a terapia especializada para resolver sus diferencias. Igualmente, ha autorizado que Andrea Nicolás viaje a España donde podrá reencontrarse con la familia de su padre y donde tiene previsto ir a un campamento de verano. Además, será Paulina Rubio quien le acompañe en los viajes de ida y vuelta para asegurarse de que el padre no lo retiene contra su voluntad. Un varapalo judicial para la cantante con el termina el enésimo enfrentamiento con su exmarido.