Naturgy pone en servicio la nueva línea de alta tensión O Irixo-Lalín

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

LALÍN

Cedida

Una segunda alimentación que mejora la calidad del suministro eléctrico

07 may 2025 . Actualizado a las 22:01 h.

Unión Fenosa Distribución, la distribuidora eléctrica de Naturgy, puso ya en servicio la nueva línea de alta tensión O Irixo-Lalín. Un proyecto largamente esperado y con la que Lalín suma una segunda alimentación que permite incrementar la fiabilidad de la red. La nueva LAT de 132 kV y de 21,5 kilómetros, incluye el enterramiento de más de cuatro kilómetros de la línea eléctrica por la Nacional 525. Una actuación que permitió salvar la carballeira de Casas Vellas tras años de encendidas protestas y evitó, según apuntan desde Naturgy, «cualquier afección».

El anillado de Lalín llega con años de retraso sobre las previsiones iniciales y lo hace en un momento en que las mejoras de la red eléctrica se perciben como más necesarias que nunca, especialmente ahora, algo más de una semana después del gran apagón que afectó a toda la Península.

Seguridad

Esta nueva infraestructura, que conecta la subestación de O Irixo, en Ourense, con la de Lalín, supone un avance fundamental, apuntan desde la firma, «para garantizar el suministro de energía eléctrica a los más de 14.000 puntos de suministro de la comarca. Permite asimismo cerrar el circuito de alimentación «garantizando un suministro más seguro y estable en toda la comarca, que hasta ahora dependía de una única línea de 66 kV conectada a la subestación de Chantada».

El proyecto de esta segunda fuente de alimentación para Lalín es una demanda histórica del Concello de Lalín. Para la delegada de UFD en Pontevedra, María Luisa Álvarez, «esta actuación no solo garantizará la continuidad del suministro ante posibles incidencias de la red sino que también asegurará el crecimiento futuro de la comarca, proporcionando la capacidad necesaria para afrontar nuevas demandas energéticas en los ayuntamientos del Deza».

Desde UFD se recalca el compromiso con la comarca dezana «garantizando ella compatibilidad entre el desarrollo de sus instalaciones y el respeto por el entorno y la comunidad». La línea de 21,5 kilómetros, optimiza, dicen, el trazado a su llegada a Lalín con el enterramiento de la misma a lo largo de 4,3 kilómetros siguiendo la Nacional 525, evitando de esta forma la afección a Casas Vellas y reduciendo, apuntan, el impacto ambiental y social de la infraestructura.

Potenciación de la subestación con la instalación de un transformador

En Lalín, Unión Fenosa Distribución realizó también la potenciación de la subestación de Lalín, que incluyó la instalación de un nuevo transformador 132/20 KV de 30 megavatios. Los trabajos estaban ya en marcha en el 2023. El objetivo era preparar la subestación para recibir la nueva línea de 132 KV procedente de O Irixo que completó ahora el anillado de Lalín. El anuncio de la Xunta, que dio el visto bueno a los trabajos, se publicó el 25 de agosto del 2022 y en ese momento se fijaba un plazo de ejecución de 13 meses desde la última autorización administrativa.

UFD gestiona en la provincia de Pontevedra 4.800 kilómetros de red de alta y media tensión, 11.800 kilómetros de red de baja tensión, 31 subestaciones, 5.500 centros de transformación y da servicio a más de 515.000 puntos de suministro.

Actuaciones desde un anillado anunciado en el 2007 con una inversión millonaria

Muchas cosas pasaron desde el 24 de julio del 2007 cuando en un acto celebrado en Lalín, Fenosa anunciaba una inversión de 10 millones de euros en mejoras que incluían ya, la mimetización de las instalaciones en Feás y el anillado de la red eléctrica. Era una obra en tres fases. La segunda incluía la LAT.

En mayo del 2014 se hablaba ya de una inversión de 15 millones de euros, presentada en marzo de ese año, para unas mejoras eléctricas que incluían la línea de O Irixo y que estaban pendientes en ese momento de ser aprobadas por el Consello de la Xunta.

En octubre de ese año una tala en la Fraga de Casas Vellas disparaba las quejas vecinales y nacía Salvemos Catasós. Se sucedieron las movilizaciones vecinales y sociales. Los afectados reclamaban el enterramiento de la línea para evitar afecciones, que finalmente se llegó a hacer tras numerosas acciones de protesta que dieron lugar también a una paralización de los trabajos varios años.

En diciembre del 2014 el pleno de Lalín instaba ya a Fenosa a suspender los trabajos en la zona de Casas Vellas. Se solicitaban también los informes técnicos ambientales necesarios sobre la delimitación y alcance de la posible declaración como Espazo Natural de Interese local (ENIL) del espacio de Casas Vellas.

En diciembre del 2019, el BNG mostraba su preocupación por el interés de Naturgy y el gobierno lalinense por recuperar el anillado eléctrico para Lalín.

En mayo del 2020 y tras un corte de luz en la localidad, el alcalde de Lalín, José Crespo, abordaba con Fenosa la búsqueda de una alternativa al anillado sin afectar a Casas Vellas. En mayo del 2021, Naturgy anunciaba que enterraría la línea cambiando el proyecto y cifrando la inversión prevista en 12 millones de euros. Se modificó el trazado para enterrar la línea por la N-525. En octubre del 2021 la empresa eléctrica presentaba el proyecto en Industria, en marzo del 2022 se sometía a información pública y en mayo del 2024 se daba luz verde a la iniciativa.