Vuelve la Champions. Y, como siempre, depara sorpresas. Gracias a este nuevo formato, que es más atractivo, cualquier favorito puede quedarse fuera de los ocho primeros clasificados. Se vio el año pasado con el Madrid. Por ello deben ir con todo desde el primer partido. Esta nueva Champions es más competitiva. Antes se iban seleccionando y, casi siempre, llegaban los mismos equipos a las últimas rondas. Incluso había veces que, en las dos últimas jornadas de la fase de grupos, ya estaba todo decidido. Ahora, en cambio, es más atractivo.
En esta edición hay seis equipos de la Premier League. La competición inglesa tiene mucho dinero y, además, hay clubes con buenos jugadores y entrenadores. Son muy competitivos y, allá donde van, siempre son los favoritos. Hoy en día, los grandes equipos de Inglaterra, el Barça, el PSG y el Real Madrid —ahora también gracias al nuevo entrenador— tienen el mismo juego. Presionan arriba, quieren tener el control, llevar la iniciativa... Cuando se enfrentan entre ellos dejan un partido muy atractivo. Cada encuentro tiene muchas alternativas. El fútbol ha cambiado. Cada vez es más difícil llegar a una final. Los equipos deben tener todo de cara, ser muy buenos e, incluso, que haya algo de suerte.