
Media docena de técnicos y futbolistas, todos con pasado en el Celta, integran el Fursan Hispania, el club que fundó Míchel Salgado hace cinco años con el objetivo de formar a futbolistas jóvenes
06 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El 1 de marzo del 2013 aterrizó en Dubái Pablo Coira (Vilagarcía, 1979). Tenía 32 años y había vuelto de su última experiencia como futbolista en el Budapest Honvéd húngaro. «Estaba esperando que el teléfono sonara para irme fuera». Sonó. Era su amigo Míchel Salgado (As Neves, 1975). El mismo al que había llegado para relevar en el Celta, cuando fichó por el Real Madrid, allá por 1999. Acababa de invertir en Emiratos en una escuela de fútbol base llamada Spanish Soccer School. Salgado quería que Coira fuera uno de los técnicos que liderara el proyecto. Aceptó. Siete años después, en el 2020, Salgado decidió montárselo por su cuenta. «Salió de la escuela y fundó su propio club, al que llamó Fursan Hispania. Salimos en Segunda División, de aquella no había Tercera. No teníamos los jugadores suficientes, así que me puse las botas de nuevo para completar plantilla». Coira alternó durante un tiempo como jugador y entrenador. «Venía a formarme como técnico desde cero, a coger experiencia». Las categorías de élite, en Emiratos, exigen que jueguen al menos cinco futbolistas nativos del país, más el portero. Una normativa que chocó frontalmente con el espíritu del club. Les costó el descenso.
«Nosotros queríamos formar jugadores desde abajo y la mayoría son chicos que vienen de fuera. He entrenado aquí a niños desde los nueve o diez años, que ahora tengo ya en el primer equipo. Es una experiencia muy gratificante», admite Coira. El cuadro técnico de la escuela se ha ido ampliando estos años con profesionales llegados desde Galicia: Iñaki Cabaleiro (Vigo, 1989), Álex Calvo (Vigo, 1989), Ares Outeiral (Vigo, 2005) y Miguel Barros (A Cañiza, 2000), todos con pasado en la estructura del Celta.
«Había entrado en el Celta en prácticas y me quedé un par de años como preparador físico del cadete B. El verano pasado tenía que buscarme las habichuelas. Estaba en un campus en A Madroa y escuché a Salgado comentando con Álex Calvo que necesitaban un preparador físico para el Fursan. Me ofrecí allí mismo. Se lo conté a mis padres por teléfono. Tenía ganas de probar fuera por experiencia personal». Miguel Barros fue el último en incorporarse a la parcela técnica.
«En la preparación física, aquí el fútbol es muy diferente. Hay mucho chico africano, que destaca en fuerza, potencia y velocidad. Nuestros chavales no suelen tener esas características. Entrenamos siempre a última hora por el calor. Ahora mismo, que son las dos de la tarde aquí, tenemos unos 42 o 43 grados. Las condiciones climatológicas también condicionan los calentamientos, aquí duran mucho menos. Alterno la preparación en la escuela y en el primer equipo. Me gustaría evolucionar hacia el alto rendimiento», cuenta Barros.
La plantilla del Fursan es la más joven de la categoría. Tiene una media de 22 años. Una de sus últimas incorporaciones fue otro gallego. En enero llegó Robert Carril (Vigo, 2004). Criado en la cantera del Celta, se había quedado sin los minutos que pretendía en el Alondras. «Cuando me propusieron venir a Dubái, le di muchas vueltas. Era un cambio muy grande en mi vida. Pero, al final, lo vi como una oportunidad, como un escaparate para intentar ser futbolista profesional. Si me sale, pues perfecto. Y si no, pues a casa y a otra cosa», dice. La comuna gallega hace vida fuera del Fursan. Se les han sumado un par de madrileños, entre ellos el portero. «Somos una familia, yo no hubiese venido aquí sin ellos aquí», admite Carril. «Está claro que hacer grupo ayuda», avala Coira.
Anthony Khayat, la perla libanesa que ha fichado el Celta
Entre los futbolistas que han pasado recientemente por el Fursan Hispania están el etíope Anwar Mediero, criado en la cantera del Barça y que viajó a Emiratos buscando un club en el que recuperarse de las lesiones que sufrió, y el ourensano Álex Cid, tras su paso por las canteras del Celta y el Atlético de Madrid. Mediero regresó a España en el verano del 2023 para incorporarse a la cantera del Lugo y juega ahora en el Santa Marta de Tormes de la Tercera Federación. Cid regresó el pasado enero tras recibir una oferta del Marbella en la Segunda Federación.
El futbolista con mayor escaparate en los últimos tiempos del Fursan es el joven libanés Anthony Khayat, internacional por Emiratos, un atacante que incorporará el Celta, con el que ya jugó varios torneos, para su equipo juvenil de División de Honor. Khayat, que ya estuvo en Vigo entrenándose en A Madroa, tuvo que regresar a la escuela del Fursan en Dubái, a la que se había incorporado en el 2016 (Coira lleva nueve años entrenándolo), para cumplir la reglamentación FIFA sobre el traspaso de menores ya que no tiene nacionalidad europea. Elegido como uno de los jóvenes talentos de la competición árabe, Khayat regresará a Vigo para ser jugador del Celta en unas semanas tras haber cumplido recientemente la mayoría de edad.