No iba a salir, pero un amigo quiso aprovechar su paso por Barcelona aquel día para quedar con él. Estas son los hechos contrastados y las pruebas de lo que ocurrió aquella noche: de los baños de la discoteca Sutton a su ingreso en la cárcel de Brians 2
22 feb 2024 . Actualizado a las 23:43 h.La ley de garantía integral de libertad sexual, aprobada el 7 de octubre de 2022, más conocida como la del «solo sí es sí» o ley Montero por la ministra de Igualdad que la impulsó ya tiene su condena más mediática. El futbolista Dani Alves pasará cuatro años y medio en prisión (ya ha cumplido uno desde su detención) por violar a una joven en el baño de un reservado de la discoteca Sutton de Barcelona la madrugada del 30 al 31 de diciembre de 2022. La sentencia está lejos de los 15 años de pena máxima prevista para un caso como este, en el que las pruebas constataron que se trató de una agresión sexual con penetración. A Alves se le ha aplicado un atenuante de reparación del daño por haber entregado antes del juicio 150.000 euros a la víctima. Con todo, con este fallo el castigo penal se acerca al mínimo previsto para este delito, marcado en cuatro años. Precisamente otro futbolista, el excéltico Santi Mina, fue sentenciado con ese número de años en la cárcel. La norma del «solo sí es sí» nació con polémica al eliminar la distinción entre el abuso y la agresión sexual, motivando salidas de la cárcel prematuras de condenados y puedes consultarla aquí. Te contamos cuáles han sido, paso a paso, los hechos que han motivado esta última condena.
1. De visita en España
Alves, que se encuentra cumpliendo su contrato como jugador del equipo mexicano Club Universidad Nacional (conocido como Pumas), está en casa de su suegra en Tenerife durante las Navidades del 2022 tras la celebración del Mundial de Qatar. Acompaña así a su mujer, la modelo Joana Sanz, que cuida de su madre enferma (fallecería solo unos días después). Tiene previsto viajar en Nochevieja de vuelta a México para retomar el campeonato liguero al comienzo del año siguiente.
2. Escala en Barcelona
Aprovechando que el astro brasileño hace escala el 30 de diciembre en la capital catalana antes de reincorporarse al trabajo con el equipo azteca, su amigo, el chef Bruno Brasil contacta con él para ir a cenar y salir por la noche.
3. Fiesta en la discoteca Sutton
Acaban la celebración en la exclusiva discoteca Sutton. Llegan, según acreditan las cámaras de seguridad, a las dos de la madrugada. Alves le insiste a un camarero en invitar a su reservado en la zona VIP a un grupo de mujeres en el que figura la víctima. Aunque en un principio rechazan la invitación, finalmente acceden a compartir el mismo espacio.
4. Intimidación del futbolista
«Soy jugador de petanca en L'Hospitalet de Llobregat». Así se presentó Alves ante la víctima, que según su relato no lo conocía. Las imágenes determinan que esa noche el jugador, además de bailar sensualmente, forzó a la víctima en la pista de baile a tocarle los genitales. Después le pidió que la acompañara al baño.
5. La violación
Según los agentes que atendieron a la víctima y figura en la denuncia, ella accedió voluntariamente al baño, pero tras intercambiar algunos besos le dijo que quería irse, a lo que él reaccionó de forma brusca encerrándola. «Recuerdo que en un momento me levantó contra el lavabo donde te lavas las manos. Quiso realizar sexo oral, y en ese momento me puse aún más nerviosa. Solo recuerdo que comenzó a penetrarme de manera muy violenta». Además del testimonio, el examen forense y su ropa avalan lesiones compatibles con una agresión sexual.
6. Baile de versiones
La estrategia de defensa del futbolista levantó las sospechas de los investigadores desde el principio por sus constantes cambios e incongruencias relatando lo sucedido. Primero negó el encuentro, después dijo que sí lo hubo pero sin consecuencias, más tarde señaló que charló con ella cuando se la presentaron unos amigos, llegó a indicar que se produjo una felación consentida por ella y, cuando ya estaba cercado por las pruebas que hallaron restos de su semen en la zona vaginal de la joven, afirmó que la relación fue deseada por ambos y que la víctima pudo «ofenderse».
7. La detención
Los Mossos d'Esquadra aprovecharán el viaje de Alves de vuelta a España en enero para acudir al entierro de su suegra para detenerlo. Con todas las pruebas incriminatorias sobre la mesa, deciden hacer una argucia para evitar que se dé a la fuga al estar residiendo en otro país. Lo citan, en principio, para una «reunión informal» por «supuestos tocamientos». Sin embargo, en cuanto pisa la comisaría, es detenido. La jueza lo envía a prisión el 20 de enero de 2023. Solo tres días después por «motivos de seguridad y convivencia» es trasladado del penal de Brians 1 al de Brians 2 con todas las precauciones, estando acompañado por funcionarios que lo escoltan.
8. Cambios de abogados
A Alves y su familia la forma en la que se produce su detención, les hacen recelar de su letrada, Miraida Puentes Wilson, asesora en materia económica del internacional brasileño. La sustituye el penalista Cristóbal Martell, defensor en otros casos de Messi o la familia Pujol. Causó revuelo por decir que Dani Alves mintió sobre lo ocurrido para «ocultar su infidelidad». Finalmente será Inés Guardiola Sánchez, experta en derecho penitenciario quien lo defienda en el juicio.
9. El juicio
El 5 de febrero de este año Dani Alves empieza a ser juzgado en la Audiencia de Barcelona. Las declaraciones de los Mossos y el relato de la víctima, junto con las pruebas, acabarán demostrando la agresión sexual. Su mujer señaló que debido a la embriaguez con la que llegó a casa «no se podía hablar con él» y su colega Bruno Brasil ahondaría en esta estrategia de defensa relatando todo el alcohol que consumió. La acusación particular ejercida por la denunciante pide 12 años de prisión, mientras que la Fiscalía exige nueve años de cárcel.
10. La condena
Alves acaba de ser condenado a cuatro años y medio de prisión. Una sentencia que no ha contentado a ninguna de las dos partes. La defensa la analizará para comprobar «si la gravedad de la condena se puede comparar con la gravedad de los hechos». La abogada del jugador ha dicho que recurrirá para «defender su inocencia hasta el final», añadiendo que Alves «está entero». En todo caso, incidió en que «cuatro años y medio son mucho mejor que 9 y 12».
Las reacciones tras conocerse la sentencia se han sucedido rápidamente. La exministra de Igualdad Irene Montero ha remarcado que «se acabó el silencio de las mujeres y la impunidad de los agresores».
La actual política en ese cargo, la socialista Ana Redondo, ha celebrado que en este caso concreto «han funcionado todos los protocolos» y que «la ley del solo sí es sí funciona». El caso ha supuesto un duro revés para el brasileño, que se encontraba al final de su carrera profesional en el mundo del fútbol, provocándole pérdidas millonarias al ser rescindido su contrato y ver truncados los cuantiosos ingresos por patrocinios que percibía.