Los tres rodajes que trajeron a Verónica Echegui a Galicia

P. V. LA VOZ

CULTURA

Verónica Echegui, en una escena de «El menor de los males»
Verónica Echegui, en una escena de «El menor de los males» VOZ AUDIOVISUAL

La actriz madrileña participó en su primera película gallega, «El menor de los males», producida por Voz Audiovisual, el mismo año en que se dio a conocer con «Yo soy la Juani». Dos producciones más la hicieron volver a la comunidad mucho más recientemente

25 ago 2025 . Actualizado a las 18:09 h.

El fallecimiento de Verónica Echegui a causa de un cáncer ha provocado una profunda conmoción en el mundo del cine. La actriz madrileña, que llamó la atención desde su primer largometraje, en el que dio vida al personaje protagonista de Yo soy la Juani, dirigida por Bigas Luna, destacó por su talento y carisma. La intérprete también dejó su huella en Galicia desde muy pronto. Su primer contacto con la región llegó nada más comenzar su carrera. El mismo año en el que acaparaba titulares por representar como nunca antes en la gran pantalla el mundo choni y poligonero, Echegui realizó su primer rodaje en nuestra tierra. Y dos de sus últimos trabajos la hicieron volver, muchos años después. 

Tres proyectos muy diferentes que hicieron conectar a la actriz, que valoraba como pocas la naturaleza, con una comunidad que, como ella misma decía, la enamoró. Repasamos los tres rodajes que la trajeron aquí, en momentos muy distintos de su vida.

Verónica Echegui, en una escena de «El menor de los males»
Verónica Echegui, en una escena de «El menor de los males» VOZ AUDIOVISUAL

«El menor de los males»

En el 2006, el mismo año de su estreno por todo lo alto en el cine con la celebrada Yo soy la Juani, Verónica Echegui tuvo su primer proyecto en tierras gallegas con el filme El menor de los males, dirigida por Antonio Hernández y producida por Voz Audiovisual, y que la hizo alzarse con la prestigiosa Biznaga de Plata a la mejor actriz de reparto.

Echegui era uno de los vértices de ese triángulo actoral que completaban Carmen Maura y Roberto Álvarez, y que acompañaban actores gallegos como Antonio Durán Morris, Xavier Deive, Berta Ojeda y César Cambeiro.

Recordaba ese rodaje íntegro en Pontemaceira, en el concello de Negreira, con cariño. «Me han tratado de maravilla», decía a La Voz, confesando que su contacto con Galicia le había hecho enamorarse de esta tierra. «Antes de esto solo conocía Lugo», reveló.

Rodada íntegramente en Pontemaceira, en el concello de Negreira, la película narra la historia de un político, Eduardo (Roberto Álvarez), que acude a Galicia a visitar a su hermana Julia (Carmen Maura). No se imagina que su amante secreta, Vanessa, el personaje de Echegui, va a irrumpir en la aparente paz familiar para torcerlo todo inesperadamente.

Rodaje de la película «El menor de los males» en Pontemaceira
Rodaje de la película «El menor de los males» en Pontemaceira ÁLVARO BALLESTEROS

La llegada de Echegui al pazo familiar no podría haber sido más llamativa. La joven llega en su propio coche, un Mercedes Clase A, y, a punto de encontrarse con su amante, se estampa contra un poste. Una escena de riesgo para la que, por supuesto, la actriz madrileña contó con una doble de acción. «Claro que no haría falta, porque en una de las pruebas, ella misma chocó, aunque sin mayores consecuencias, contra una columna», narró entonces el periodista de La Voz Christian Casares, que estuvo presente en esa jornada de rodaje. La escena, de solo unos segundos, necesitó una docena de tomas y más de una hora de rodaje para quedar a gusto del realizador. 

«3 caminos»

El Camino de Santiago trajo de vuelta a Verónica Echegui a rodar en Galicia. Fue de la mano de Amazon Prime y la Xunta como iniciativa estrella en la promoción de ese Xacobeo 2021 marcado todavía por la pandemia.

Para todos los involucrados en la serie 3 caminos fue un momento especial en buena medida por eso. Rodada en localizaciones como Samos, Fisterra, O Cebreiro y, cómo no, la propia Santiago de Compostela, los actores vivieron en su propia burbuja durante esos meses de confinamiento, PCR, mascarillas y medidas de distancia social. «No fue un proyecto más», confesó Echegui en una entrevista a La Voz, en la que reveló las muchas razones por las que este nuevo rodaje en Galicia fue especial.

Verónica Echegui y Álex González a su llegada a Santiago tras el rodaje de «3 caminos»
Verónica Echegui y Álex González a su llegada a Santiago tras el rodaje de «3 caminos»

«La hemos rodado en localizaciones reales y hemos pasado tiempo en cada uno de esos sitios. He descubierto lugares increíbles y lo he compartido con personas que, siendo cinco, con Ceci [Cecilia Gómez] seis, hemos coincidido en un momento vital similar y hemos aprendido mucho los unos de los otros. Hemos convivido un montón de meses, porque esto no es algo que ruedas en Madrid y al final del día vuelves a tu casa. Aquí la relación va más allá del rodaje. Y luego con la pandemia en medio ha sido un antes y un después», expresó.

La naturaleza del proyecto y de las condiciones en las que se rodó marcaron profundamente a Echegui. «Esa convivencia con la naturaleza diaria y con las otras personas... Descubres que hay desconocidos que se vuelven conocidos», destacó sobre esos días, en los que conectó como nunca con sus compañeros. «Ocurrió una simbiosis entre nosotros. Con muy poca gente he llegado a tener tanta confianza como con estas personas», expresó.

Verónica Echegui, durante el rodaje de «Justicia artificial» en el parador de Muxía
Verónica Echegui, durante el rodaje de «Justicia artificial» en el parador de Muxía Ana García

«Justicia artificial»

Solo un año después del estreno de 3 caminos, Verónica Echegui regresaba a Galicia para rodar un thriller político con toques de ciencia ficción, Justicia artificial, cuyo rodaje, íntegro en la comunidad, se desarrolló principalmente en la ciudad de A Coruña, pero también en Ferrol, Ponteceso, Monfero, Irixoa, Cambre, Laracha, Oleiros o Muxía, donde el parador sirvió como escenario de numerosas escenas.

En la película dirigida por Simón Casal de Miguel, Echegui daba vida a la protagonista, la jueza Carmen Costa, que desconfía de la aplicación de la inteligencia artificial en la justicia. Para dar vida al personaje, la actriz no dudó en valerse de la ayuda de una verdadera magistrada que la ayudase a meterse de lleno en la idiosincrasia de una profesión tan alejada de ella. «Consulté a una jueza gallega maravillosa con la que asistí a algunos juicios haciéndole preguntas», contó la actriz.

El equipo de rodaje de «Justicia artificial» trabajó hasta última hora en la playa de Santa Comba
El equipo de rodaje de «Justicia artificial» trabajó hasta última hora en la playa de Santa Comba I. VALERIO

Con eso estaba preparada para representar a una mujer ficticia que vive en Orillamar, pasea por Adormideras o se baña en San Amaro. No solo allí, también en la playa de Ponzos y en la de Santa Comba, en Ferrol. En esa zona se rodaron varias escenas, en un día de mar revuelto, en el que Echegui se zambulló una y otra vez a última hora de la tarde de un día de noviembre para buscar la escena perfecta.