Declaran improcedente el despido de un conductor de Curtis que estaba de baja
CURTIS

La empresa le acusó de llevarse material, pero él tenía las facturas de compra
22 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Una baja médica y la desaparición de material de trabajo sumó un cóctel para el despido de un trabajador de una empresa de Curtis. El hombre, conductor de profesión, avisó a su empresa a mediados del año pasado de que causaba baja por enfermedad y avisaba en qué punto dejaba el camión, así como las llaves del vehículo. Pero en la compañía, con sede en el polígono de Teixeiro, echaron en falta una seria de elementos, lo que fue denunciado ante la Guardia Civil de Betanzos y el juzgado de esta localidad. Allí tomaron nota de la larga lista de objetos desaparecidos del vehículo, como un televisor, un microondas, material de aseo personal y limpieza del camión, bolígrafos, mecheros, cables y cargadores de móvil, herramientas de trabajo y dos bocinas, entre otros. El dueño también notó que faltaba un juego de llaves de la nave, el teléfono móvil de la empresa y la tarjeta que almacena los datos del tacógrafo.
Ese mismo verano, el conductor remitió una carta a la compañía acusándola de colocar en el camión que conducía un GPS sin su conocimiento. «Nunca presté consentimiento para la instalación de dicho dispositivo. Esta actuación vulnera la buena fe que debe existir en cualquier relación laboral», señalaba en el documento.
Ese mismo mes, la empresa le abrió un expediente disciplinario por la presunta apropiación de los enseres arriba citados. El empleado replicó a los pocos días asegurando que solo se había llevado las llaves de la nave, el teléfono y la tarjeta del tacógrafo, que se ofreció a devolver, al tiempo que solicitaba el archivo del expediente disciplinario.
Lejos de eso, la empresa le comunicó por carta el despido «por faltas injustificadas a su puesto de trabajo, transgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza». Le indicaron que sobre la desaparición de los objetos del camión «únicamente solo pudo ser usted el autor de los hechos porque el vehículo no se encuentra forzado y no aporta ninguna prueba que los desvirtúe». El empleado presentó varias facturas de su bolsillo que se correspondían con los objetos que la compañía echaba en falta en el camión.
No aceptan la nulidad
El tribunal aceptó parcialmente la petición del conductor, que solicitaba la nulidad del despido. Pero el juez solo lo consideró improcedente, con lo que obligaba a la empresa a readmitirlo o bien a indemnizarlo con cerca de 13.000 euros.
El caso se elevó a la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, donde el empleado intentó demostrar que el verdadero motivo del despido era la baja médica, pero el argumento no fue admitido por los magistrados.
Por contra, achacaron el cese de la relación laboral «a la apropiación de los elementos del camión, extremo que no quedó probado, y carecía de fundamento pues sobre los bienes que se referencian aporta el trabajador facturas que se detallan, por lo que no se acreditó que fuesen propiedad de la empresa», a excepción del teléfono, las llaves de la nave y la tarjeta del tacógrafo, que devolvió. El TSXG sostiene el argumento de la primera instancia y declara el despido improcedente.