




























El presentador, que se encargó de dar el pregón de las fiestas, aseguró que era uno de los días más felices de su vida
07 sep 2025 . Actualizado a las 23:53 h.El cielo se fue abriendo en Porto do Son al ritmo de unas dianas y alboradas de las que se encargó el grupo de gaitas Canlebó, anunciando el comienzo de las Festas do Carmen, cinco intensas jornadas que ponen el colofón al verano en el municipio.
Después salieron desde el CEIP Santa Irene en desfile los cabezudos Os Viqueiras de Ordes, haciendo disfrutar, principalmente, a los más pequeños. Pusieron rumbo a la plaza de España, porque allí, a las 13.30, estaba fijado el inicio del pregón, que este año pronunció el televisivo Juan Fuentes. Aunque es natural de Santiago, el presentador tiene mucha relación con el municipio sonense y sobre todo con Baroña, concretamente con Abuín.
Aseguró estar nervioso y tuvo que «tirar de papeis» en uno de los días «máis felices e importantes da miña vida». Habló «desde o corazón» para completar «o pregón máis difícil». En Porto do Son, aprendió Fuentes «as cousas máis importantes da vida», porque fue en el municipio donde escuchaba el gallego fuera de las aulas. «Téñovos que agradecer todo o que son porque vós regalástesme a lingua», afirmó. Repasó su idilio con la localidad sonense: «Fíxenme unha persoa aquí. Porto do Son é o lugar a onde sempre queres volver e do que nunca queres marchar».
Entre aplausos, acabó Juan Fuentes anunciando que la hija que espera, la primera, se llamará Carmen, precisamente, en la apertura de las Festas do Carme.
La Virxe do Carme surcará el mar y se recordará a los fallecidos
La segunda jornada de las fiestas de Porto do Son comenzará con las dianas y alboradas, a las 9.00 horas, a cargo del grupo de gaitas Canlebó. A las 10.30 saldrá la imagen de la Virxe do Carme en procesión desde la capilla de A Atalaia hasta la explanada portuaria. A su llegada a este punto, a las 11.00, se celebrará la tradicional misa solemne en la que también estará la Banda de Música de Caamaño. Cuando concluya la ceremonia religiosa tendrá lugar la siempre emotiva procesión marítima en la que no faltará la ofrenda floral por los fallecidos en el mar. El colofón al acto lo pondrá una tirada de fuegos artificiales.
El resto del día será tranquilo hasta que llegue la noche, porque los que tengan ganas de bailar podrán hacerlo al ritmo que marquen las orquestas América y New York.