La reunión anual atrajo a 35 asistentes de varias generaciones
28 jun 2025 . Actualizado a las 20:49 h.Los veteranos del Obradoiro solo se perdieron su cita anual por los imperativos de la pandemia. Saben que el mes de junio es tiempo de reencuentro, de compartir recuerdos, mesa y mantel, de alimentar la llama de la tradición. Saben que esa cita es sagrada y ni siquiera un calor sofocante como el de este sábado merma la capacidad de convocatoria.
Este año se estrenó en el grupo Moncho Novoa, que vino desde Ourense. Y desde Madrid llegó un histórico del equipo que jugó en División de Honor en el año 1982, Pepe Rivera. Son dos en una lista de 35 asistentes, la que completaron Antonio López Cid, José Torres, Juan Illobre, Eugenio Díaz, Tonecho Lorenzo, Suso Fernández, Charly Uzal, Robert, Julio Bernárdez (presidente de la Federación Galega de Baloncesto), Jose Cobelo, José Ramón Ferreiro, Moncho Lago, Vicente Sanchís, Óscar Amoedo, Pedro Caldas, Popocho Modrego (el base que firmó el acta baja protesta del célebre partido ante el Juver Murcia, el que desató la larguísima batalla judicial), Txiqui Aramburu, Óscar Martínez, Julio Jiménez, Andrés Caso, Rafa Reparaz, Caldas, Mario Iglesias, Calvelo, Luis Cebreiro, Murri, Gerardo Anllo, Manolo, Xulio Teixeira, Rafael Bobi, Chicho Casal, Pepe Casal y Miguel Juane. Cualquiera de ellos puede hablar de la historia del Obra en primera persona.