La vida de los millonarios de la lotería en A Mariña y el Occidente, desde los 1.007 millones de pesetas de 1991 y 1.000 más en el 92

j.a. RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

En A Mariña y el Occidente astur ha habido bastantes afortunados, pero no todos tuvieron después la misma suerte y hubo incluso quien se arruinó

22 dic 2023 . Actualizado a las 19:28 h.

Desde hace treinta años, tanto la comarca de A Mariña como la del occidente asturiano no se pueden sentir especialmente maltratadas en los sorteos de lotería nacional, la primitiva o de la ONCE. La suerte ha hecho en tres décadas a un puñado de millonarios y agraciado con cantidades importantes a centenares de personas. Entrando en detalle, la evolución personal de estos millonarios han sido dispar. La gran mayoría, por lo que ha trascendido, han llevado su condición con normalidad, sin estridencias en su día a día ni gastos estrafalarios, y se ha dado el caso de alguno (también de los que ganaron más dinero) que, tras invertir en negocios buena parte de su patrimonio generando empleo y riqueza, tuvo malas rachas y concluyó su vida laboral trabajando de nuevo como asalariado.

Una fecha que se puede tomar como referencia es el 17 de octubre de 1991. Ese día, en el sorteo de la lotería primitiva dos vecinos de Tapia de Casariego, José Francisco Arias y Reyes Varela, se hicieron millonarios con un premio compartido de 1.007 millones de pesetas (seis millones de euros). Habían jugado 200 pesetas. José Francisco Arias decidió hacer con su dinero algo por su pueblo y compró tres barcos de pesca, generando en su momento en torno a 30 puestos de trabajo. Por Tapia se cuenta que con los años la suerte no le acompañó.

Un año después, la fortuna volvía a detenerse en la zona, al tocar en Ribadeo otro boleto de la primitiva, agraciado con 1.033 millones de pesetas (seis millones de euros). La identidad de la afortunada no trascendió en un primer momento y por Ribadeo se desataron los rumores. Fue un misterio que tardó unas semanas en resolverse. Bastó con que la mujer premiada cerrase el puesto que tenía en la plaza para que las sospechas sobre su supuesta identidad saliesen a la luz. En aquel momento fue el segundo premio de mayor cuantía de la lotería que se había dado en la historia y Ribadeo se convirtió en noticia a nivel nacional.

En el 2001, el sorteo de Navidad regó de millones el Eo. En el restaurante La Barrica, en la Administración de Lotería de Vegadeo y en la panadería Pan de Sante (Trabada), repartían el tercer premio; en total, 3.600 millones de las antiguas pesetas (21 millones de euros). Fueron muchos los agraciados, en un premio muy repartido. Como ocurría justo un año después, con los 16,8 millones de euros (2.795 millones de pesetas), que repartió el restaurante O Castelo de Cervo: las 35 series del número 31.203, el tercer premio del sorteo del gordo de Navidad. Más de 300 familias mariñanas -casi todas residentes en Cervo, San Cibrao, Xove y Burela- celebraron su buena suerte. Fueron 700 papeletas de 10 euros del número agraciado: 24.000 euros para cada una, pero entonces se declaró que hubo quien ganó hasta 720.000 euros.

El epicentro de la buena suerte está en Ribadeo

El epicentro de la fortuna está en los últimos años en Ribadeo. En mayo del 2017, una bonoloto dejaba 1,8 millones (a nivel popular hay consenso en que el agraciado fue un conocido empresario de Riotorto); en enero del 2019, otra primitiva dejaba 1.635.569 euros (el ganador no se identificó públicamente como tal, pero trascendió que fue un vecino de Rinlo); en el 2022, el vendedor de la ONCE Juan Antonio Pérez Cantero colocaba el primer premio de once millones de euros del sorteo del 11 del 11 de la ONCE (el ganador sigue siendo un misterio), y en septiembre, tres camareros del restaurante Marinero se repartían un millón de euros de un Rasca Platinum de la ONCE, que no les evitó que sigan trabajando, pero sí, como manifestaron, con más tranquilidad.