El equipo de Moncho Fernández peleó contra un gigante
10 feb 2024 . Actualizado a las 21:25 h.El Obradoiro perdió en Sar, pero lo hizo contra un equipo que juega en Europa. Pese a caer otra vez, el Obra hizo cosas que me gustaron, que no se vieron en otros partidos anteriores. El equipo buscó el juego interior y Pustovyi se lució. Esta situación dio sus frutos ante una gran defensa, muy sofisticada, como la del Unicaja, de las mejores del campeonato.
Además, podemos destacar una cuestión fundamental en el desarrollo del encuentro. Jugadores tan decisivos como Ejim y Carter estuvieron poco más de veinte minutos en pista. En el Obra, Scrubb, Pustovyi, Kovliar y Tinkle sobrepasaron los treinta. Este dato es muy significativo. Las rotaciones del conjunto malagueño dan miedo. Los andaluces llegaron a la recta final con jugadores más descansados, más frescos.
El Obradoiro luchó y murió en la orilla. Peleó contra un gigante. Y eso merece todo el respeto del mundo. Un intercambio de golpes ante un adversario de este nivel es muy complicado, pero fue un partido muy digno del equipo de Moncho Fernández. El Obra lo puso todo sobre la pista.
Ahora, más que nunca, hay que tener mucha tranquilidad y paciencia, tanto en el club como en todo su entorno. Obradoiro y Breogán se van a salvar si se mantiene la calma. Quedan muchas finales y el rival del Obra no es el Unicaja. Es un auténtico lujo tener al Obradoiro y al Breogán en la ACB, lo que nos permite disfrutar cada semana de jugadores de máximo nivel, jugadores de la talla de Ejim o Carter. Y sentir el orgullo de ver al joven árbitro gallego Guillermo Ríos en Sar, en su primera temporada en la máxima categoría.