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Viernes, 23 de Mayo 2025, 08:48h
Tiempo de lectura: 2 min
Toledo se ha convertido en un auténtico laboratorio del patrimonio histórico al destinar fondos europeos Next Generation para impulsar, entre otras iniciativas punteras, una plataforma de preservación digital que integra modelado 3D, gemelos digitales y blockchain, tecnología que garantiza la autenticidad e integridad de los registros digitales creando un sistema inmutable que protege el patrimonio documental contra mani-pulaciones o pérdidas. Estas herramientas permiten digitalizar grabados históricos con resolución microscópica, crear réplicas virtuales exactas de monumentos emblemáticos y monitorizar en tiempo real su deterioro.
La catedral primada de Toledo es un caso de éxito. Enfrentaba problemas de conservación debido a fluctuaciones ambientales hasta que la creación de un gemelo digital completo revolucionó su preservación. Está basado en cerca de 1700 escaneos que han generado un mapa de 68.000 millones de puntos. Este modelo tridimensional procesa datos de cientos de sensores distribuidos por el templo, detectando microfisuras antes de que sean visibles y simulando intervenciones arquitectónicas con precisión submilimétrica.
España está a la cabeza de Europa en digitalización patrimonial, con ejemplos como el Museo Municipal de Valdepeñas, que ha creado gemelos digitales de más de 250 piezas arqueológicas, superando al British Museum en número de piezas digitalizadas en 3D. En la catedral de Cádiz, una experiencia inmersiva con recreaciones generadas por ordenador permite a los visitantes ver la ciudad en diferentes momentos históricos, creando una narrativa que sumerge al visitante en el contexto temporal que se está explicando. Esta posición de liderazgo ha sido reconocida por la Comisión Europea, que ha recomendado digitalizar para 2030 todos los monumentos en riesgo de degradación, siguiendo el modelo español.
La máquina del tiempo. La experiencia inmersiva Toledo monumental VR ofrece recorridos virtuales que reconstruyen en tiempo real cómo eran los edificios en diferentes épocas históricas. Ha logrado reducir el impacto físico en los monumentos mientras aumenta la satisfacción de los visitantes al permitir explorar zonas restringidas y distribuir mejor los flujos turísticos.
IA contra el deterioro. Implementado en los principales monumentos, este sistema de inteligencia artificial predictiva anticipa degradaciones unificando datos climáticos, análisis de riesgos y monitoreo continuo. Un edificio histórico puede ser analizado para predecir cómo le afectará el cambio climático, con un 70 por ciento menos de coste que las intervenciones de emergencia.