Ofelia, concursante gallega de «MasterChef»: «Soy al amor lo que Paquirrín a la música, un cero a la izquierda»
SOCIEDAD
El arranque de la novena edición del concurso reunió el martes a cerca de 1,6 millones de espectadores y un 15 % de cuota
14 abr 2021 . Actualizado a las 16:58 h.Se llama Ofelia, tiene 29 años y es la nueva concursante gallega de la novena edición de MasterChef que se estrenó en Televisión Española en la noche del martes. Esta emprendedora de Santiago de Compostela entró en las cocinas del popular concurso al lograr hacerse con una de las plazas del espacio de cocina.
Ofelia se define a sí misma como «supergallega». Su gran afición son los caballos y ha competido en pruebas de equitación durante años. Su mayor referente en la vida es su abuela, que se llamaba Ofelia, como ella, y era el eje central de toda la familia. De ella sacó dos enseñanzas que le parecen fundamentales: una, que «la clave de un buen matrimonio es un buen servicio»; y la otra, que «engordar es una ordinariez», según asegura la participante. A Ofelia le apasiona vender. Asegura que de pequeña era un terremoto, pasó por ocho colegios diferentes y fueron necesarias dos personas a cargo de ella para poder controlarla.
La vida de Ofelia, subraya TVE, ha sido una auténtica telenovela. Es la única persona religiosa de su familia y está muy orgullosa de ello. En el futuro le encantaría tener una familia enorme y una vida conservadora. Le atraen los hombres clásicos, pero no ha tenido mucha suerte hasta ahora en este terreno. «Yo soy al amor lo que Paquirrín a la música, un cero a la izquierda», asegura”.
Ofelia forma parte del grupo de 15 aspirantes elegidos por los jueces Pepe Rodríguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo-Nágera para demostrar su pasión por la cocina en la novena edición del concurso de talentos culinario producido por RTVE en colaboración con Shine Iberia. El estreno fue seguido en La 1 por cerca de 1,6 millones de espectadores (1.574.000) y un 15 % de cuota de pantalla.
MasterChef ha notado el bum experimentado por la cocina durante el confinamiento, que ha dado como resultado que el número de solicitudes para entrar en su novena edición se haya doblado con respecto a las anteriores.
Pero solo los 50 mejores candidatos de entre los 70.000 inscritos para el proceso de selección lucharon por conseguir el delantal. Una vez logrado, en el primer programa los 16 aspirantes viajaron a Palma de Mallorca para participar en un cocinado solidario. Cada equipo cocinó dos platos con algunos de los productos locales más sabrosos de un menú diseñado por los chefs Maca de Castro y Santi Taura, ambos con una estrella Michelin.
De regreso al plató, los delantales negros se enfrentaron a su primera prueba de eliminación y su primera caja misteriosa. Dentro encontraron productos del mar poco conocidos para estos aficionados a la cocina, como una lamprea o vampiro de agua. El chef gallego Pepe Solla, con una estrella Michelín, fue el encargado de asesorarlos a la hora de preparar estos ingredientes.