Esta repostera crea el «pack cumple en casa» para alegrar las grandes celebraciones con pocos invitados de la era covid

Patricia Calveiro Iglesias
Patricia Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Sandra Alonso

Alba Vidal hace en Red Velvet virguerías dulces y, adaptándose a la situación sanitaria, ofrece ahora un formato variado y reducido para que no sobre nada en las fiestas condicionadas por la pandemia

22 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Ella empezó a hacer postres en casa «como un hobby». Al principio, Alba Vidal Arca hacía tartas para amigos y familiares. Se le daba bien, y pronto comenzó a tener cada vez más y más compromisos. «Yo cobraba los materiales y lo hacía por placer pero, sin darte cuenta, se te va yendo de las manos», relata. Decidió entonces abrir su propio taller de repostería creativa y artesana en O Milladoiro (Ames), Red Velvet, que lleva ya cinco años realizando por encargo todo tipo de virguerías dulces para bautizos, bodas, comuniones y otros eventos. Con la pandemia, cuenta, «un montón de pedidos se nos venían abajo», no solo por la cancelación de actos también porque las medidas sanitarias obligaron a reducir el aforo de las celebraciones. «Los cumpleaños y aniversarios son una partida importante para nosotros. La tarta más vendida es de entre 10 y 12 raciones pero, al no podernos juntar, muchos llamaban diciendo que se les hacía demasiado grande, ya que iban a ser solo cuatro o cinco, los familiares más cercanos», señala. En lugar de resignarse, pensó en una solución práctica y creó el «pack cumple en casa», que se entrega a domicilio en Santiago y O Milladoiro. «La idea gustó mucho», reconoce. Se trata de un formato variado y reducido, para alegrar las grandes fiestas de pocos invitados y que no sobre nada. Está pensado «para que en esta época de distanciamiento social la gente pueda hacer los cumpleaños en casa». Incluye una tarta de entre 4 y 6 raciones, media docena de cupcakes o cakepops y 6 galletas de mantequilla decoradas o cookies con chips de chocolate.

Así es como el atelier repostero de la avenida de Muíño Vello sigue creando magia y llevándola a decenas de hogares. Dice Alba, quien además es administrativa en un taller de O Castiñeiriño (J&J Automoción), que el truco está en las cantidades y en la actitud. Ella es buena con los números, indudablemente, y aunque sea robando horas de sueño sus elaboraciones resultan sabrosas y vistosas. Explica que para los niños personaliza el pastel gratis con su personaje o tema favorito y, para adultos, con su nombre y edad. «Los clientes me suelen mandar fotos o vídeos y ver las caras de sorpresa que ponen es lo que más motiva». Además, desde antes ya de la pandemia Red Velvet lanzó el «pack celebra bonito», con todo lo necesario para montar una mesa dulce (hasta la papelería) en eventos más pequeños, y también prepara desayunos a domicilio.

Talento entre fogones

La Praza da Abastos fue el escenario ayer de la final de cocina del Xuventude Crea, certamen que pone en valor el talento de jóvenes gallegos de entre 16 y 30 años. Allí compitieron seis finalistas, cinco candidatos individuales y una pareja. El primer premio, dotado con 3.000 euros, recayó en Shewitz Pérez y su Brisa marina; el segundo, de 1.500 euros, en Andrea Maseda y Miguel Morán, que presentaron una crema de ortiga y grelo, aire de rustido y crujiente de filloa de Muimenta; y el tercero, de 1.000 euros, fue para Javier Lojo, con un canelón de vieiras y manitas de porco celta. La directora xeral de Xuventude, Cristina Pichel, asistió en Santiago a esta final entre fogones.

Profesorado volcado

Muchos han sido ya los que han apoyado a Hugo Yáñez, el pequeño de Brión que padece la enfermedad de Dent, comprando la camiseta solidaria del proyecto Art for Dent con la que la familia recauda fondos para financiar la investigación. Entre otros, todo el profesorado del colegio donde estudia, el CEIP de Pedrouzos, incluidos -por supuesto- el director (Xoán Cabo) y su tutor (Luis Feito). La madre de Hugo, María Castelao, destaca el apoyo que les está brindando el centro y su involucración. Destaca que ahora, además de Rei Zentolo, se han unido a los puntos de venta de productos solidarios los estancos de la rotonda de Os Ánxeles (Brión) y de la rúa da Senra (Santiago).