El comercio de Melide se planta y exige recuperar la céntrica ubicación del mercadillo

Natalia Rodríguez Noguerol
natalia noguerol MELIDE / LA VOZ

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Una treintena de negocios proponen una ordenación que una la localización original con el entorno del edificio multiusos

20 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Los comerciantes de Melide han dado un golpe en la mesa para que el bipartito municipal (Adiante Melide-PSdeG) mueva ficha en lo que se refiere a la ubicación definitiva de los puestos de venta ambulante que se trasladaron, a raíz de la pandemia, al entorno del edificio multiusos. Meses después de la última reunión que una representación del sector mantuvo con los gobernantes locales para pedir el retorno de los tenderetes de textil, calzado, ferretería y plantas a su localización original en el centro urbano, el mercadillo permanece en el lugar al que el ejecutivo melidense decidió trasladarlo para malestar de muchos comerciantes, que perciben una merma en la afluencia de gente a la feria de los domingos.

La situación la abordaron esta semana en una reunión en la sede del colectivo comarcal de empresarios (Asetem) una treintena de comerciantes, tanto asociados como ajenos a la entidad, que acordaron solicitar formalmente al gobierno local el traslado de los puestos a su ubicación original -cantón de San Roque, y rúas Alexandre Bóveda y Convento- y la habilitación de otras calles también previstas en la correspondiente ordenanza para la reubicación de los puestos con una ubicación problemática. La propuesta pasa por una ordenación que asigne también espacios en la avenida de América, que serviría así de enlace entre el emplazamiento tradicional del mercadillo y su nueva ubicación en la rúa Galicia y la plaza de las Universidades. De ese modo, el retorno de la venta ambulante al centro de Melide no causaría un agravio a los negocios localizados en la zona a la que se trasladó. «É -entienden los comerciantes- unha cuestión de vontade, e de gañas de traballar».

Los puestos de venta ambulante se disparan sin control ni cobro

El encuentro de los comerciantes locales puso de manifiesto problemas como, entre otros, la falta de control en el acceso al mercadillo de los vendedores ambulantes. Según trascendió, se detectaron «postos novos sen permiso», que elevaron hasta 90 el número de tenderetes, e, incluso, 40 comerciantes están en lista de espera para instalar su puesto en la feria dominical de Melide. Frente a esas cifras, la ordenanza reguladora del mercado ambulante del Concello de Melide restringe a 75 el número máximo de puestos que pueden autorizarse. En ese sentido, los comerciantes abogaron por aplicar esa restricción, al entender que el mercadillo dominical «ten que existir, pero ser un complemento ao comercio local». De continuar la dinámica actual, la situación será la inversa, tal y como advirtieron los comerciantes locales, que suman unos setenta.

Por otro lado, el sector criticó el «agravio comparativo» que consideran supone el que el Concello lleve desde el año 2018 sin recaudar las tasas por la venta ambulante, con importes, por otro lado, que entienden se deberían actualizar. Además, denunciaron la «falta grave» en la que incurrió el gobierno local «coa excusa da pandemia», trasladando los puestos, ya que, tal y como figura en la ordenanza, «para modificar a colocación do mercado de postos ambulantes e do mercado dos días de feira por causa de forza maior, de interese xeral ou municipal, requirirase acordo do pleno da corporación».